Pedimos disculpas por las molestias que podamos ocasionar mientras realizamos el 'fracking' debajo de su casa
Según una encuesta realizada por YouGov (una empresa de investigación de mercado internacional basada en Internet), Londres se enfrenta a una amplia oposición ya que el 74% de los británicos está en contra de esta polémica norma. Con estos datos en la mano, un grupo de manifestantes de Greenpeace, armados con cascos, chalecos e 'instrumentos' para aplicar 'fracking', llegaron en un camión a la casa de Cameron, ubicada en un sitio que ellos consideran apropiado para extraer gas, para protestar en apoyo de la mayoría ciudadana.
Luego de acordonar la propiedad del primer ministro británico con vallas metálicas, los manifestantes erigieron un letrero que decía: "Pedimos disculpas por las molestias que podamos ocasionar mientras realizamos el 'fracking' debajo de su casa". Además, los activistas medioambientales le recomendaron a David Cameron, con sorna e ironía, que en caso de tener alguna queja se dirigiese a la oficina del primer ministro David Cameron.
Los miembros de Greenpeace también quisieron entregarle un cheque gigante por un valor de 50 libras esterlinas, que es la indemnización que se pagaría a los propietarios de la casa u otras propiedades privadas para permitir a las empresas perforar debajo de sus inmuebles.
"El primer ministro está a punto de subastar más de la mitad del Reino Unido a los 'frackers', incluidos parques y zonas de gran belleza natural", lamentó el activista Simon Clydesdale.