Bajo el lema "Somos una nación, tenemos derecho a decidir, es el momento de la ciudadanía", miles de manifestantes, se echaron a la calle portando 'ikurriñas' (banderas del País Vasco), y lanzando lemas a favor de la independencia.
De acuerdo con los organizadores, además de reivindicar el derecho a decidir, el objetivo de la iniciativa es "crear un movimiento civil que fuerce a los partidos a abrir un vía vasca para la autodeterminación".
Asimismo, destacan que esta movilización ha superado de una manera significativa sus expectativas y que ha conseguido algo "inédito" para el País Vasco como lo es reunir a "diferentes sensibilidades políticas del pueblo vasco" a fin de "dar la palabra a la ciudadanía".
Por su parte, el delegado del Gobierno español en el País Vasco, Carlos Urquijo, dijo en vísperas de la concentración que si Euskadi inicia un camino soberanista al igual que Cataluña el Gobierno central seguirá su "obligación" de "cumplir y hacer cumplir la ley", porque la Constitución española se fundamenta en "la indisoluble unidad de la nación española".