El general retirado del Ejército Keith Alexander ya se lo advirtió a los legisladores estadounidenses en una sesión a puerta cerrada en 2012. "Están ensayando", esas fueron las palabras de Alexander, entonces jefe de la Agencia de Seguridad Nacional, según explicó a la agencia de noticias Bloomberg, bajo condición de mantener el anonimato, un funcionario que estuvo presente en la reunión.
EE.UU. descubrió entre 2012 y 2013 que los conductos de gas natural y las centrales eléctricas del país habían sido objeto de espionaje y que se habían filtrado numerosos datos sobre el tema. Según el Departamento de Justicia, una unidad del Ejército Popular de Liberación estuvo detrás de estas "exitosas filtraciones".
El país norteamericano obtuvo numerosos emails, archivos en formato PDF y otros documentos que evidenciaron lo ocurrido. Sin embargo, lo que más les preocupó a los funcionarios estadounidenses fue conocer que el trabajo de los 'hackers' se centraba en los sistemas de control y de adquisición de datos, conocidos como SCADA, de las computadoras industriales, indicaron personas familiarizadas con los incidentes.
Los 'hackers' podrían utilizar sistemas SCADA para manipular las válvulas, aumentar la presión y reventar o explotar tuberías o paralizar la actividad de una central eléctrica, según señala Bloomberg.
En muchos casos, cuando se cometen infracciones de un sistema informático desde fuera, ya se han llevado a cabo los pasos necesarios para realizar un ataque, aseguró el exdirector de la NSA y la CIA Michael Hayden a la agencia de noticias.