"Hoy se tomó la decisión política de que la misión será enviada para dos años. La formación de la misión comenzará de inmediato y podría dirigirse a Ucrania en un futuro próximo. Su tarea será promover la reforma del sistema de asuntos internos y servicios de seguridad en Ucrania", dijo el ministro citado por la agencia Itar-Tass.
El canciller lituano también calificó el plan de paz propuesto por el presidente Poroshenko de "razonable" y destacó que las sanciones contra Rusia no deben "retirarse de la mesa".
Por su parte, el ministro de Exteriores neerlandés, Franz Timmermans, declaró que la tercera fase de las sanciones contra Rusia todavía "no forma parte de la agenda", pero cree que es importante que Kiev y Moscú se sienten a la mesa de negociaciones.