"Los amigos estadounidenses están descontentos con el South Stream, pero ya lo estaban en 1962, cuando se iniciaba el proyecto de intercambio de gas con Alemania mediante tuberías. Desde entonces no ha cambiado nada, ahora también están descontentos. La única diferencia es que son ellos los que quieren entregar el gas al mercado europeo. Les aseguro que este gas no va a ser más barato que el ruso: el gas transportado por gasoductos siempre es más barato que el gas licuado. Es una situación habitual: hacen todo lo posible para que este contrato fracase. No estamos ante nada sorprendente: no es más que una típica lucha entre competidores. Durante esta lucha se usan también estrategias políticas", ha opinado el presidente ruso.
Hoy mismo el gigante gasístico ruso Gazprom y el consorcio energético austriaco OMV firmaron un acuerdo sobre la creación de South Stream Austria GmbH, una empresa conjunta dedicada a la construcción del tramo austriaco del gasoducto South Stream. Esto, a pesar de que otro Estado miembro del proyecto, Bulgaria, a inicios de junio ordenó paralizar las obras de construcción del South Stream en respuesta a una solicitud de la Comisión Europea, que la había acusado de violar las regulaciones europeas. Los primeros suministros de gas ruso a Austria a través del nuevo gasoducto tendrán lugar en 2016.
"Se habla de que Europa tiene una gran dependencia del gas ruso. Nosotros nos basamos en el hecho de que cualquiera de nuestros socios tiene derechos, y puede y debe crear las condiciones que más le convengan, tener contactos y contratos con muchos países. Nosotros hacemos lo mismo: hace poco firmamos un contrato con China y seguiremos promoviendo nuestro producto a los mercados en desarrollo", comentó Putin. Acentuó que este gasoducto no es un intento de evitar el tránsito por Ucrania o de poner trabas a alguien, sino que se trata de un proyecto que corresponde a los intereses económicos de Moscú.
Conflicto ucraniano
Otro tema que Putin abordó durante la rueda de prensa fue la situación en Ucrania."Moscú siempre defenderá a los rusos étnicos en el este de Ucrania", ha subrayado Putin. Pero acentuó que Rusia no es parte del conflicto ucraniano. "Rusia no impone ninguna condición previa a las negociaciones entre el sudeste de Ucrania y Kiev. Rusia no es una parte del conflicto", insistió el mandatario ruso, pero ofreció su visión de cómo se podría avanzar en la pacificación.
En su opinión, no tiene sentido demandar que las autodefensas se desarmen mientras sigan armadas las agrupaciones radicales, ya que temen por sus vidas y por las de sus seres queridos. Insistió en que en primer lugar debe haber cambios legislativos que garanticen los derechos de los ciudadanos.
VERSIÓN COMPLETA DE LA RUEDA DE PRENSA DE VLADÍMIR PUTIN