¿Qué le quita el sueño al asiático más rico?

Li Ka-shing, el hombre más rico de Asia, dice que padece de insomnio debido a la creciente brecha entre los ricos y pobres y a las tensiones en Hong Kong.
El multimillonario chino Li Ka-shing, jefe del Holding empresarial Cheung Kong, ha confesado en un encuentro con estudiantes de la Universidad de Shantou, que sufre insomnio desde hace mucho tiempo debido a la creciente estratificacíon de la sociedad y a la menguante confianza, lo que puede llegar a ser una "nueva normalidad", informa la revista 'Bloomberg Business Week'.

Según Li Ka-shing, las autoridades tienen que cambiar con urgencia la ley para superar la brecha entre ricos y pobres. El hombre de negocios advierte que está en juego la estabilidad política y social de la República Popular China. No da recetas específicas, pero afirma que las leyes deben hacerse al mismo tiempo flexibles y eficientes, porque, de momento, la situación sigue deteriorándose.

Además, el multimillonario se muestra preocupado por la ausencia de recursos naturales. A su juicio, la política económica debe ser sólida y aumentar la eficacia de la energía sin usar las fuentes 'sucias'. El Gobierno tiene que liderar el cambio e inyectar una "fuerte dosis de elixir liberador" en el sistema educativo, ya que la falta de inversión en la educación equivale a "un crimen contra el futuro", advierte. La Universidad de Shantou es la única de China que depende totalmente de la financiación privada. Li Ka-shing invirtió en ella 774 millones de dólares y, en realidad, es su fundador.

Sobre las tensiones en Hong Kong, el hombre de negocios se muestra preocupado porque -afirma- "la confianza, la piedra angular de una sociedad ilustrada, se está desmoronando ante nuestros ojos".

El 20% de todo el electorado de Hong Kong, unas 800.000 personas, votaron en un referéndum informal a favor del proceso democrático de elegir al líder de la Región Administrativa Especial. Mientras tanto, China se muestra en contra e insiste en que los intereses del país están por encima de los intereses de una autonomía.

Li Ka-shing asegura que no desa protestas y revoluciones en el territorio de China y, por lo tanto, hace un llamamiento a los posibles participantes en movimientos de protesta, a los estudiantes de 'su' Universidad. Según él, los estudiantes llegarán a ser guardianes de futuro y, a buen seguro, encontrarán el medicamento contra el insomnio.