En la actualidad se llevan a cabo una serie de experimentos con algunos vehículos militares inteligentes, como el que concluyó hace dos semanas en Kaliningrado, donde probó el robot de combate Plataforma-M, un pequeño vehículo con ruedas de oruga controlado por control remoto. Los diseñadores han equipado a este aparato con cuatro lanzacohetes, ametralladoras y rifles Kaláshnikov.
Según informó Oleg Martianov, miembro de la Comisión Militar-Industrial dependiente del Gobierno y director de un laboratorio de robots de combate, las pruebas del Plataforma-M mostraron su alta eficacia en zonas urbanas y en ataques contra blancos del enemigo, tanto fijos como móviles.
Este sistema robótico inteligente será utilizado junto con los vehículos de combate Taifun-M (diseñados para luchar contra comandos subversivos) y vehículos aéreos no tripulados (que servirán para localizar y eliminar a saboteadores).
El Plataforma-M, que al igual que los Taifun-M no tiene análogos en el mundo, entrará en servicio de las Tropas de Misiles de Designación Estratégicas de Rusia como vehículo de asistencia y combate. Se informa que con este nuevo sistema robótico se pueden llevar a cabo tareas de reconocimiento, detectar y destruir blancos fijos y móviles o patrullar zonas sensibles, entre otras misiones.
En el futuro será creado en Moscú el Centro para la Investigación y Prueba de la Robótica, donde otra línea de investigaciones se encargará de desarrollar las armas del futuro, incluidas las basadas en inteligencia artificial.