Los radicales enfurecidos no entraron en la oficina del diario. Los empleados de 'Vesti' opinan que, probablemente, los organizadores del ataque no lo habían planeado. "Al parecer, su tarea era llevar a cabo el ataque rápidamente y desaparecer lo más pronto posible para evitar ser detenidos por la Policía", dijeron.
Entre tanto los periodistas no dudan que Ígor Lutsenko, uno de los líderes de Euromaidán y ahora miembro del consejo de la ciudad de Kiev, fuera el que ordenó esta acción porque hace dos semanas hubo intentos de hacerlo, aseguran.
Se trata de uno de los pocos medios ucranianos que tratan de presentar la información sobre la aguda crisis en Ucrania no de manera unilateral: publican todas las opiniones de todos los lados del conflicto, por lo que se ha convertido en blanco de críticas e incluso amenazas.
En una carta abierta de 'Vesti' al presidente Poroshenko, al primer ministro y al presidente del Parlamento ucraniano, el personal alertó que "hoy en día en la categoría del medio 'malo' puede caer cualquier medio de comunicación que ofrezca un material indeseable".