Por parte de Israel, por el momento no se ha registrado ninguna víctima mortal por los lanzamientos palestinos. El caso más grave es el impacto de un misil contra un camión cisterna con gas en una gasolinera de la ciudad costera de Ashdod, registrado este viernes. Un conductor sufrió heridas de gravedad en la explosión que se produjo, mientras que siete personas sufrieron heridas leves.
El sistema de defensa antiaérea Cúpula de Hierro ha sido capaz de interceptar casi todos los misiles que presentaban amenaza para las ciudades israelíes.
Durante todos los días del intercambio de fuego el personal sanitario israelí ha atenido a 126 personas, pero en la mayoría de los casos se ha tratado de pacientes estresados y con traumas mentales. Los medios israelíes también informan de que un hombre de 74 años recibió importantes traumatismos al caerse de una escalera cuando bajaba a un refugio antiaéreo.