Vanoost asegura que se tardan "semanas y meses" en la recogida de pruebas antes de que se puedan sacar algunas conclusiones. Por lo tanto, opina que "todo lo que se está diciendo ahora son sólo especulaciones por motivos políticos".
Una de las herramientas que utilizan los medios occidentales para manipular las informaciones al respecto es simplemente la ocultación de algunos hechos evidentes.
1. El complejo antiaéreo Buk, cuyas fotos y videos presentan los servicios de seguridad de Ucrania como pruebas de la implicación de Rusia en el asunto, realmente pertenece al Ejército ucraniano. Sus materiales muestran el sistema con el número 312 presuntamente cruzando la frontera ruso-ucraniana, pero el mismo complejo ya fue visto en marzo en áreas controladas por los militares. Además, las propias tropas aseguran que complejos de este tipo no cayeron en manos de las milicias.
2. El pasado 18 de julio, el jefe del Servicio de Seguridad de Ucrania, Valentín Naliváichenko, anunció la captura de unos 'observadores' de los sistemas Buk supuestamente procedentes de Rusia. No obstante, la participación de especialistas de este tipo en el funcionamiento de dicho complejo no es necesaria. Además, tras la publicación de la declaración de Naliváichenko, no se difundió ninguna otra información sobre la supuesta captura de esas personas.
3. Es sorprendente que las autoridades que sospechaban que el Buk podría estar en manos de las milicias no impusieran de inmediato la prohibición de los vuelos sobre la región. La primera información de que las autodefensas podrían tener a su disposición esos sistemas antimisiles apareció a finales de junio, pero la parte ucraniana no hizo nada para proteger el cielo de esta hipotética amenaza.
4. Las autoridades de Kiev destacan la presencia de pruebas, pero no llegan a mostrarlas. El presidente de Ucrania, Piotr Poroshenko, aseguró que se difundieron algunas imágenes de satélite que muestran que el avión fue derribado por las milicias. Palabras infundadas del líder ucraniano están citadas por los principales medios del mundo, mientras que expertos instan a no sacar conclusiones apresuradas.
5. Desde el principio las milicias pidieron que expertos internacionales llegaran al lugar del siniestro, pero las autoridades de Kiev impidieron su llegada inmediata. La ausencia de expertos internacionales en el lugar durante varios días sorprendió a los periodistas occidentales que, a su vez, ya tuvieron tiempo para explorar a fondo el lugar del accidente con sus propios ojos.
6. Ninguno de los vecinos locales vio el lanzamiento de misiles, aunque el Buk suele dejar huellas bastante notables. Los habitantes de la República Popular de Donetsk fueron testigos de la caída de los escombros del avión de Malaysia Airlines. Sin embargo, no hay evidencias de rastros visibles de los misiles que normalmente permanecen en el aire durante unos diez minutos.
7. Tampoco está completamente claro por qué las informaciones de que los servicios de seguridad de Ucrania obtuvieron las grabaciones de las presuntas conversaciones de las autodefensas sobre el avión antes del siniestro no se difundieron inmediatamente después de la catástrofe.
8. Las grabaciones publicadas poco después de la tragedia fueron eliminadas y a continuación reemplazadas con otra versión. Los expertos rusos dudan de su autenticidad y aseguran que se trata de la combinación de varias grabaciones diferentes.
9. Rusia oficialmente se negó a recoger las cajas negras del avión siniestrado. Sin embargo, los medios de comunicación siguen especulando acerca de los intentos de Moscú para hacerse con estos dispositivos, a pesar de que en una entrevista ofrecida poco después de la tragedia, el ministro ruso de Relaciones Exteriores, Serguéi Lavrov, aseguró que Rusia no tenía la intención de obtener las cajas del Boeing 777 de Malaysia Airlines. Evidencia de ello es que las cajas negras fueron entregadas la noche de este lunes al representante especial del Gobierno de Malasia, el coronel Mohd Saqri.
10. Los expertos neerlandeses que por primera vez llegaron este lunes al lugar donde se almacenan los cuerpos refrigerados de los fallecidos dijeron que están en las "condiciones adecuadas". El experto Peter van Vliet indicó que a los cuerpos "se les proporcionan las condiciones óptimas de almacenamiento". No obstante, esta declaración no impidió que algunos medios aseguraran lo contrario.
11. La llegada a la zona del conflicto de los propios expertos ha sido otro tira y afloja. Kiev y Washington, con su consecuente difusión en la mayoría de medios occidentales, se han encargado de acusar a Donetsk y a Moscú de poner trabas a los especialistas para que se acerquen al lugar de los hechos. Sin embargo, los propios observadores de la OSCE han desmentido que las autodefensas les negaran el acceso al lugar de la catástrofe aérea.
12. Finalmente está el caza de las Fuerzas Aéreas de Ucrania SU-25 que volaba cerca y en dirección al Boeing 777 de Malaysia Airlines minutos antes de la tragedia. El Ministerio de Defensa de Rusia realizó la revelación este lunes en rueda de prensa, pero el tema ha sido ignorado o publicado 'de puntillas' por la prensa occidental. Basta con echar un vistazo a los principales medios para ver que esa noticia casi si aparece, a pesar de que Rusia ofreció todo tipo de pruebas. Al hilo de lo anterior es muy importante recordar que tras producirse la tragedia, los militares ucranianos negaron el mismo día 17 de julio que sus aviones hubieran realizado vuelo alguno. "La aviación de las fuerzas involucradas en la operación espesial no ha despegado en absoluto hoy: ni los helicópteros, ni los aviones, ni los cazas", dijo a la agencia Interfax-Ucrania el portavoz del centro del comando de la llamada "operación antiterrorista", Vladislav Selezniov.