El asesinato del archiduque Francisco Fernando de Austria, heredero de la corona austro-húngara, y de su esposa Sofía Chotek en Sarajevo a finales de junio de 1914 por parte del joven nacionalista Gavrila Princip fue el detonante de una serie de eventos que finalmente desencadenarían la Primera Guerra Mundial. Hace exactamente un siglo, un seis de agosto, Austria-Hungría declaraba guerra a Rusia.
En la conocida como la Gran Guerra se vieron involucradas todas las grandes potencias industriales y militares de la época. Por un lado, las Potencias Centrales: el Imperio alemán y el Imperio austrohúngaro. Por otro lado se encontraba la Triple Entente, formada por el Reino Unido, Francia y el Imperio ruso. Ambas alianzas sufrieron cambios según avanzaba la guerra.
Italia, Japón y EE.UU. lucharon al lado de la Triple Entente, mientras el Imperio Otomano y Bulgaria se unieron a las Potencias Centrales.
Rusia, que fue obligada a tomar parte en esta guerra, desplegó millones de soldados. La guerra avanzaba y el mar también se convirtió en uno de los principales escenarios de las batallas. Enormes buques de guerra distribuían toneladas de balas y explosivos. El conflicto además, por primera vez fue encarnizado en los cielos y los pilotos de primeros aviones de combate fueron considerados héroes.
En junio de 1916 se saldó con éxito una ofensiva rusa que, dirigida por el general Alexéi Brusílov, permitió que las tropas del país se internaran en las filas austrohúngaras. Fue una operación que obligó a Alemania a frenar su avance en el Frente Occidental y destinar un número importante de tropas al este.
El éxito de la ofensiva provocó la entrada de Rumanía en la guerra al lado de la Entente. Sin embargo resultó fácilmente derrotada y ocupada por los alemanes.
La crisis política que sufría Rusia en aquellos momentos llevó a que después de la revolución de Octubre los bolcheviques firmaran el armisticio con los imperios centrales, lo que suponía enormes sacrificios económicos y territoriales. A principios de 1918 la guerra se había terminado para Rusia.
Con todo, es difícil no valorar suficientemente el papel que jugó Rusia en esta guerra, llevando en sus hombros el Frente del Este y poniendo todos sus esfuerzos para terminar una guerra que se cobró millones de vidas humanas.