"Creo que a partir del año 2025 este avión será entregado [a la Fuerza Aérea]", dijo Bóndarev en una rueda de prensa ofrecida durante la víspera de los festejos que celebran a la Fuerza Aérea de Rusia, según Interfax.
Según el comandante, el nuevo proyecto, denominado Futuro Sistema Aéreo de Interceptación Lejana (PAK-DP, por sus siglas en ruso) será desarrollado usando todas las tecnologías existentes en la industria aérea rusa. Sin embargo, Bóndarev no precisó cuál será la compañía que estará a cargo del proyecto. Solo se conoce que la oficina de diseños Mikoyán (sus MiG-25 y MiG-31 son los últimos interceptores adoptados en la URSS y Rusia) se ha involucrado en el desarrollo del interceptor MiG-41, el cual busca modernizar el MiG-31.
"Por supuesto, será algo muy moderno ya que la industria dispone de la tecnología correspondiente para su desarrollo. Estamos muy contentos de que los trabajos estén en marcha, hay muchas posibilidades de que el avión sea construido", dijo el comandante, con lo cual confirmó el inicio de los trabajos de diseño de la nave, aunque la construcción se tiene planeada para 2017.
Hasta el momento, el MiG-31 es el caza-interceptor más avanzado de Rusia, un biplaza de cuarta generación desarrollado por la URSS hace más de 25 años y cuya modernización se tiene prevista en los próximos años.
A finales de la década de los noventa, el MiG-31 fue el único caza del mundo dotado de radar AESA. Hoy en día solo dos cazas del mundo son capaces de emplear misiles aire-aire de largo alcance, los MiG-31 rusos y los cazas embarcados estadounidenses F-14.