Pese a tener un radio de alcance técnico de 4.000 kilómetros, los cuatro Su-34 que participaron en las maniobras lograron cubrir más de 50.000 kilómetros en solo tres días, practicando también el reabastecimiento en pleno vuelo en parejas, informa el sitio web 'The Aviationist'.
Los cazabombarderos de este tipo, que se encuentran entre los aviones más modernos del Ejército ruso, están provistos de una variedad de tecnologías avanzadas que serán utilizadas en las modificaciones futuras de otros modelos.
El Su-34 no es el único avión ruso que realiza vuelos en el Polo Norte. El cazainterceptor ruso Mig-31 se unirá al programa de vuelos para entrenar la identificación y el ataque de blancos en la región ártica.
Los Mig-31 desarrollados en los años noventa fueron significativamente modificados para actualizar sus capacidades y extender su periodo de servicio hasta que sea desarrollado su relevo, previsto para los años 2028-2030.
Según 'The Aviationist', las maniobras de las Fuerzas armadas rusas en la Ártica subrayan el interés reanudado que Rusia tiene hacia esta región.