El informe final que se presentará al público contendrá solo aquella información que pueda contribuir a revelar las causas de la catástrofe, ha puntualizado el Consejo y detalló que las regulaciones de la Organización de Aviación Civil Internacional se lo permiten.
El Consejo de Seguridad de los Países Bajos está coordinando la investigación de la tragedia desde el pasado 23 de julio, bajo un acuerdo con la parte ucraniana. Según las normas internacionales, los especialistas tienen un año desde el momento de la catástrofe para publicar el reporte final.
Actualmente, los expertos están trabajando en la versión preliminar del documento. Contendrá los hechos que permitirán sacar las primeras conclusiones sobre lo que pasaba a bordo de la nave antes del siniestro. Sin embargo, de momento no se prevé ninguna fecha concreta para su publicación. "Toda la información se analiza para determinar si es la misma en diferentes fuentes o hay divergencias. Es un proceso muy difícil y necesita mucho tiempo", reza el comunicado del organismo neerlandés.
El Boeing 777 malasio siniestrado llevaba 298 personas a bordo. La mayoría de ellas —196 personas— provenían de los Países Bajos. Los cuerpos fueron evacuados a una base militar neerlandesa, donde los expertos adelantan los trabajos de identificación.