"El número total de muertos (en el sudeste de Ucrania) ha superado los 2.000 y el número está creciendo de manera exponencial. El número de migrantes, entre ellos refugiados, desde Ucrania a Rusia ya es de más de 814.000 personas", dijo Churkin en una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad de la ONU sobre Ucrania.
Además, Churkin dijo que "ahora está finalizando el trabajo para el envío de un segundo convoy humanitario. Se ha acordado hoy en una conversación telefónica entre el ministro de Relaciones Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, y el ministro de Asuntos Exteriores de Ucrania, Pável Klimkin".
Rusia propuso la declaración de un alto el fuego en el sudeste de Ucrania, pero al final ha sido bloqueada por el Consejo de Seguridad de la ONU. "Un proyecto de documento sobre el alto el fuego preparado y propuesto por la delegación de Rusia fue bloqueado bajo un pretexto frívolo", lamentó Churkin.
Moscú ha reiterado que está esperando los pasos reales por parte de Kiev para resolver la situación en Ucrania.
"El presidente Poroshenko hizo repetidas declaraciones pacíficas. Habló sobre algún nuevo plan a largo plazo para la regulación de la situación, ¿dónde está este plan? O se trata de otra maniobra evasiva, detrás de la que en realidad se esconde una solución militar. Espero que los líderes de Ucrania no malgasten lo positivo de las reuniones en Minsk", señaló Churkin ante la ONU.
El diplomático ruso subrayó que el Ejército ucraniano utiliza armas de forma indiscriminada, a veces utiliza armas prohibidas, dijo.
Por otra parte, Churkin dijo que Moscú espera un "tratamiento humano" para los paracaidistas rusos detenidos en Ucrania.
"Cientos de tropas ucranianas en diferentes circunstancias se encuentran en el territorio de Rusia. Les damos comida, agua, les proporcionamos tratamiento médico y los enviamos a su país, a Ucrania. Esperemos que las autoridades de Kiev apliquen el mismo trato humano a los nueve paracaidistas rusos de los que se habla tanto en las últimas 24 horas", dijo Churkin.
Al mismo tiempo señaló que los soldados rusos detenidos tenían documentos y no estaban armados. "No se parecen mucho a un comando de sabotaje en una zona de conflicto", afirmó.