Un Sarkozy salpicado por el escándalo L'Oreal niega el uso de dinero negro

El escándalo en torno a la compañía L’Oreal tomó un giro inesperado en los últimos días por haber involucrado al presidente francés Nicolas Sarkozy. El portal digital francés Madiapart puso en duda la transparencia de los fondos destinados al financiamiento de su campaña presidencial de 2007. Según la información revelada, el mandatario francés recibía donaciones irregulares de la heredera de la marca de cosméticos L´Oreal -la mujer más rica de Francia- Liliane Bettencourt. La suma de sus aportes se estima en 150.000 euros, número que supera las normas estipuladas por la legislación francesa.

Infractora entrada en años

Liliane Bettencourt, de 87 años, posee el 30% de la empresa L’Oreal. El escándalo relacionado con su fortuna comenzó a cobrar relevancia mundial a través de las grabaciones secretas que le hizo su mayordomo. Las grabaciones fueron difundidas por Mediapart y llevaron a la acusación de que la heredera del gigante de la cosmética y el encargado de manejar su dinero, Patrice de Maistre, habían conseguido evadir impuestos enviando activos al extranjero.

"Ensuciar sin ningún asidero"

La fortuna de Bettencourt generó numerosas discusiones a lo largo de varios meses. Sarkozy se abstuvo de comentarios hasta que fue su propia reputación la que se puso en juego. Cuando esto ocurrió, el presidente salió a la palestra para defenderse y recomendó a los ciudadanos que se ocuparan de asuntos más importantes. "Me encantaría que el país se apasionara por los grandes problemas (…) en lugar de embalarse con el primer horror, la calumnia con un sólo objetivo: ensuciar sin ningún asidero en la realidad", afirmó Sarkozy.

Estas declaraciones presidenciales se debieron a las declaraciones de una tal Claire T., previamente publicadas en el portal Mediapart. Claire T. aseguró ser la ex contable de Bettencourt y reveló datos curiosos sobre el entonces alcalde de Neuilly sur Seine y sobre su entorno. Según ella, la millonaria y su esposo regularmente entregaban grandes sumas de dinero a los políticos conservadores. Uno de los que recibió el efectivo fue Eric Woerth, el actual ministro de Trabajo de Sarkozy y director de su campaña presidencial. La denunciante señaló que el propio Sarkozy aceptaba donaciones de Bettencourt cuando le realizaba visitas "habituales" como presidente del Consejo Municipal de Neuilly sur Seine entre 1988 y 2002.

Claire T. dijo haber trabajado durante 12 años para Bettencourt hasta finales de 2008. Confesó que a lo largo de estos años una de sus obligaciones permanentes era visitar uno de los bancos de París donde recibía sumas considerables de dinero. Luego, estos fondos se repartían entre los invitados del chalé parisino de los Bettencourt. "La casa siempre fue visitada por los políticos, sobre todo durante la campaña electoral. Todos iban para pedir dinero. A veces pedían 100.000 euros o incluso 200.000", contó.

La propia Claire dejó su cargo en 2008, momento en que la heredera de L'Oreal la acusó de robo de documentos. Después de la dimisión de Claire T., su lugar no permaneció vacío: lo ocupó la esposa de Eric Woerth. Sin embargo, se vio obligada a renunciar ahora al incrementarse la presión sobre su marido.

"Todo es claro. Todo es limpio"

De acuerdo a las normas establecidas por la legislación francesa, la suma máxima que puede donar una persona a un partido político en un año se estima en 7.500 euros. Es decir, la 'ayuda' de Bettencourt a Sarkozy fue 20 veces más de lo permitido. La información apareció en un momento crítico para el mandatario francés, cuya popularidad sigue cayendo. Un aporte a la caída del índice de popularidad fue también la decisión de su Gobierno de reducir el déficit presupuestario mediante la elevación de la edad de jubilación. La popularidad de Eric Woerth, uno de los autores de dicha reforma, también se vio afectada por las declaraciones de Claire T. Al rechazar la acusación desmintió los rumores acerca de su dimisión argumentando que "hace ocho años que soy tesorero de mi partido y no creo haber hecho nada malo. Todo es transparente. Todo es claro. Todo es limpio".