Los diez presuntos espías rusos detenidos en Estados Unidos el 27 de junio comparecerán hoy, ante un tribunal de Nueva York, para escuchar las acusaciones impuestas en su contra.
En vísperas de ello, la Fiscalía estadounidense les dio a conocer que se les imputan los cargos de conspiración, actuación como agentes no registrados de un Estado extranjero y lavado de dinero.
De momento, los acusados se encuentran detenidos, pero todo parece indicar que su detención no durará mucho puesto que varias fuentes estadounidenses y rusas informan sobre los preparativos para su canje a cambio de varias personas que cumplen su pena en centros penitenciarios rusos.
El primer candidato para el “ruso” es el científico Igor Sutiaguin, condenado a una pena de 15 años por cargos de espionaje a favor de Estados Unidos. Según Anna Staviskaya, la abogada de Igor Sutiaguin, el científico ya ha llegado a Viena.
“Es una práctica habitual. Se hizo muchas veces”, dijo un funcionario del Gobierno estadounidense, citado por Reuters.
Según el politólogo ruso Nikolai Zlobin, la Casa Blanca y el Kremlin ya tienen pactado el canje de espías. “Estas cosas se hacen muy rápido”, afirmó. Zlobin considera que el canje beneficia tanto a EE. UU . como a Rusia., pues recibe "una oportunidad de deshacerse rápidamente de estos agentes y salvaguardar las buenas relaciones con Moscú".
No obstante la confirmación de estos contactos por Washington, Moscú todavía rehúsa emitir comentarios en torno a la liberación de Igor Sutiaguin.
Otro candidato para el canje, de acuerdo con una lista que vio Sutiaguin, es Serguéi Skripal, ex coronel del Departamento General de Inteligencia del Ministerio de Defensa ruso, más conocido como GRU. En 2006, Skripal fue sentenciado a 13 años de cárcel por traspasar datos clasificados a Londres y se encuentra internado actualmente en una colonia penitenciaria en Mordovia, en la región del Volga.
Mientras tanto, los medios reportaban sobre posibles variantes de canje y barajan posibles resultados de la audiencia en una corte federal en el Bajo Manhattan a la que asistirán todos los alegados agentes.