El grupo de investigadores del Estado Mayor del Ejército de EE.UU. ha realizado estudios de campo en 'megaciudades' tales como Nueva York, México, Bangkok, la capital de Nigeria, Lagos, y la capital de Bangladés, Daca, para estudiar la posibilidad de una intervención del ejército. También se han realizado estudios para casos virtuales de intervención militar en las ciudades brasileñas de Rio de Janeiro y de São Paulo. "Es plausible que el Ejército pueda ser llamado para actuar en uno de estos lugares mañana", dice el estudio.
La razón del estudio radica en el hecho de que el ejército estadounidense, si bien tiene cierta experiencia en zonas urbanas como Seúl y Bagdad, entre otras, "no ha operado en megaciudades: zonas urbanas con una población de más de 10 millones". Esto, según los jefes militares de EE.UU., podría cambiar "mañana", así que ha llegado la hora de prepararse. Según el estudio "es inevitable que en algún momento al Ejército de EE.UU. se le pida actuar en una megaciudad y, por el momento, el Ejército está mal preparado para hacerlo".
Según el estudio, entre los mayores problemas de las megaciudades, cuya solución requiere la intervención militar, figuran las tasas de crecimiento explosivas, la enorme disparidad de ingresos que sigue creciendo, y el entorno de seguridad que es "cada vez más atractivo para los políticamente desposeídos", así como los desastres naturales y las redes ilegales.
El informe salió a la luz en junio de este año, anticipando la creciente polémica dentro de EE.UU. por la militarización de la policía, que salió a relucir tras los disturbios por la muerte de un joven abatido por un agente en el estado de Misuri. El portal 'Infowars' cree que
"muchos cuestionarían que el Ejército se enfocara en la ocupación interna de las ciudades, mientras la permeable frontera estadounidense representa una amenaza para seguridad mucho más fuerte", sobre todo teniendo en cuenta los informes sobre los yihadistas del grupo Estado Islámico que podrían entrar en EE.UU. por su frontera con México.