"La caída de la aeronave malasia fue una tragedia terrible. No solo causó numerosas víctimas mortales, sino que también se utilizó para hacer incrementar intencionadamente la tensión internacional, para presionar a otros Estados y para promover sanciones sectoriales contra Rusia", dijo Lavrov.
Lavrov indicó que Rusia aboga por "el estricto cumplimiento de la decisión del Consejo de Seguridad de la ONU según la cual el Consejo mantendrá bajo su control el desarrollo de la situación".
El canciller recordó que desde el 17 de julio Moscú está llamando a "una investigación internacional abierta y objetiva" de conformidad con la resolución 2166 del Consejo de Seguridad de la ONU adoptada el 21 de julio.
El 17 de julio en la parte suroriental de Ucrania se estrelló un avión de Malaysia Airlines con 298 personas a bordo. Todos los pasajeros y los tripulantes fallecieron.
Según el primer informe preliminar publicado tras la investigación de la caída del Boeing 777, la causa de la tragedia del MH17 fue un daño estructural causado por un impacto externo.