"Es un terreno árido que se podría ver en una película postapocalíptica", describe el paisaje el corresponsal de RT.
Debido a su ubicación, cuenta Gazdiev, la base de la marina se convirtió en un terreno árido con decenas de miles de barriles cubriendo la superficie de la isla ártica.
La instalación está en proceso de restauración y formará parte del sistema de bases que Rusia utilizará para patrullar la región del Ártico. Sin embargo, antes de llevar a cabo el proyecto las autoridades militares deberán encontrar un método de utilizar los miles de barriles abandonados en la isla.
"Por supuesto, la isla debe quedar libre de basura. De alguna manera, deberemos utilizar los barriles, lo que requiere financiación", comentó a RT el almirante de la Marina Rusa, Oleg Gólubev.
Mientras tanto, las tropas inventan el modo de sacar partido a los barriles. Antes de que la isla se vuelva inaccesible con el comienzo del invierno, los soldados los convierten en vallas contra el viento y en calentadores.
Las tropas pasarán turnos de un año guardando las fronteras septentrionales del país en la isla.