"Los ataques aéreos de EE.UU. en Siria le hacen el juego a Al Qaeda"

Los ataques aéreos de EE.UU. y sus aliados contra el Estado Islámico (EI) en Siria se les pueden volver en contra a Washington al hacerle el juego a Al Qaeda.
"La elaboración de una estrategia para Siria es difícil. Después de una serie de ataques dirigidos tanto contra el Estado Islámico, como Jorasán, los legisladores estadounidenses decidieron centrarse en la primera organización, que está logrando avances. Ciertamente hay ventajas en este enfoque estrecho", escribe Daveed Gartenstein-Ross en 'Foreign Policy'.

"Centrándose en el objetivo principal de esta campaña en vez de abrir otros frentes mantiene limitada la operación. Los líderes políticos pueden esperar una la victoria rápida. Pero poner énfasis en degradar y destruir al Estado Islámico teniendo manga ancha con otros grupos yihadistas en Siria podría tener graves consecuencias al dejar a Al Qaeda en una posición ventajosa", continúa Ross.

Además el debilitamiento del Estado Islámico, según Gartenstein-Ross , llevará a una 'fuga de cerebros' desde el Estado Islámico a Al Qaeda y, como consecuencia, reforzará la influencia de esta última en Oriente Medio, lo cual debe preocupar a Occidente, señala el investigador en 'Foreign Policy'.
 
Al Qaeda y el Estado Islámico se encuentran en abierta confrontación por el control ideológico y político sobre el movimiento islamista global desde hace ya unos diez años. Hasta 2006 el Estado islámico era una rama de Al Qaeda en Irak. En 2006 surgieron fuertes desacuerdos entre los distintos movimientos que pretendían hacerse con el político e ideológico en Irak. 

Esta semana EE.UU. y una coalición de países aliados (Jordania, Baréin, Catar, Arabia Saudita y Emiratos Árabes Unidos) han lanzado una serie de ataques aéreos contra posiciones de los yihadistas en Siria. 
 
La campaña militar de EE.UU. contra el Estado Islámico constará de tres fases, según el diario estadounidense ‘The New York Times’. Si la primera fase la protagonizan los ataques contra las posiciones de los terroristas, para la segunda etapa está previsto el entrenamiento y el suministro de equipamiento a los militares iraquíes y kurdos. En la tercera fase se espera la eliminación de los milicianos y sus refugios en Siria que, según el diario, tendrá probablemente lugar ya durante el mandato del próximo presidente de EE.UU.