"Ahora en las morgues [de Donetsk y las ciudades vecinas] se encuentran 400 cadáveres, 350 de ellos son de civiles. Muchos de ellos se encuentran en un estado que hace simplemente imposible identificarlos", dijo Purguín.
El político afirmó que todos los cuerpos fueron encontrados en varias fosas ubicadas en diferentes lugares que ahora están bajo el control de la milicia popular, pero que antes fueron controlados por los militares ucranianos.
Las autoridades de la república tienen previsto solicitar la ayuda de expertos rusos para identificar los cuerpos a través de las pruebas de ADN, añadió Purguín.
El 28 de septiembre, en la región de Donetsk, cerca del pueblo de Nizhnyaya Krynka, se descubrió una nueva fosa común. Purguín recordó que no es la primera fosa que se descubre en este territorio, antes bajo control del Ejército ucraniano.
A principios de la semana pasada fueron hallados enterramientos junto a una mina situada cerca del mismo pueblo. Los expertos que analizaron los cuerpos llegaron a la conclusión de que a las víctimas les dispararon en la cabeza a corta distancia.