"Durante una reunión ministerial el próximo año tomaremos una decisión sobre la fuerza de respuesta rápida, pero incluso ahora que aún no ha sido formada, la OTAN ya tiene un ejército poderoso. Lo podemos desplegar donde queramos", dijo Stoltenberg a la cadena TVP Info durante su visita a Polonia.
En medio de la crisis ucraniana, la OTAN ha aumentado su actividad en el este de Europa este año, atribuyéndolo a la necesidad de reforzar las fronteras de los países miembros de la región.
La Alianza ha reforzado sus misiones de patrullaje en los países bálticos, vuelos de vigilancia, reconocimiento e inteligencia (AWACS) en Polonia y Rumania y desplegado buques de guerra adicionales en el mar Báltico y el Mediterráneo, además de aumentar contingentes y expandir programas de maniobras.
La OTAN planea establecer cinco nuevas bases en Letonia, Lituania, Estonia, Romania y Polonia para reforzarse contra Rusia, a la que Occidente responsabiliza por la crisis en Ucrania.
Por su parte, el representante de Rusia en la OTAN aseguró que Moscú hará todo lo necesario para reforzar su seguridad, ya que las acciones de la Alianza Atlántica podrían "dañar la estabilidad en la región euroatlántica".