El diario explica que con la creación del bloque BRICS, Oriente ha declarado una guerra al dólar, y, por ende, a EE.UU. Y mientras los medios de comunicación occidentales atemorizan a la opinión pública con artículos sobre supuestos planes expansionstas de Rusia, la verdad, según el periódico, es la contraria, y pasa por el hecho de que EE.UU. quiere ocupar Europa e iniciar un conflicto con Rusia, mientras que Vladimir Putin, por ejemplo, busca mantener la paz y hacer la guerra a través de medidas económicas.
La lucha contra el dólar conlleva la destrucción económica, no solo de EE.UU., sino, ante todo, de los "dueños del mundo", que poseen y dirigen el dólar, subraya el autor del artículo, Tomas Groh. Si EE.UU. hubiera logrado que Europa chocara de frente con Moscú, arrastrándolos a una guerra, él mismo habría tenido la oportunidad a socavar, al menos parcialmente, la posición de Rusia y de su economía, según el artículo.
Ucrania es el centro del conflicto y EE.UU. no puede permitir que la situación se resuelva a través de las negociaciones y como posibilidad llegar a una federalización de Ucrania. De hecho, según el diario, EE.UU. se propone precisamente lo contrario, buscando argumentos para las provocaciones y una razón para empezar un conflicto militar con Rusia.
Si Europa sigue apoyando al presidente ucraniano, Piotr Poroshenko, y a su entorno, Ucrania caerá en el colapso absoluto y Europa será testigo en todo su esplendor del conflicto al que ha permitido que la aboquen.