Un año después: Seis tragedias de la guerra en Ucrania

Hace un año comenzaron en Ucrania las manifestaciones que desembocaron en el cambio del poder, la división del país, y miles de muertos y damnificados. Entre un sinnúmero de tragedias que vivieron los ucranianos, hay al menos seis imborrables.
Se cumple un año de guerra civil en Ucrania, donde el 21 de noviembre de 2013, miles de manifestantes -entre ellos muchos radicales-, se convocaron en Maidán, la plaza principal de Kiev. Luego hubo enfrentamientos violentos, asesinatos por francotiradores, desapariciones de periodistas y fosas comunes en el sureste del país, donde hasta el momento continúan los combates. Y por supuesto, las tragedias de Odesa y del Boeing 777, que crearon un contexto ante el cual se ocultan otras tragedias cotidianas de los ciudadanos del país.

Maidán mortal


 
Febrero fue el mes más sangriento de protestas en Kiev. El 20 de febrero, el día más mortífero del Maidán, más de 100 personas, tanto manifestantes como fuerzas de seguridad, fueron asesinadas. Ochenta manifestantes murieron por las balas de francotiradores, crímenes cuya autoría aún no ha sido revelada. Un mes después del tiroteo, el ministro de exteriores de Estonia, Urmas Paet, dijo que "la nueva coalición" no quería "investigar qué pasó exactamente". 
En abril, los fiscales ucranianos detuvieron a varios agentes de la policía antidisturbios Berkut como posibles "francotiradores del Maidán". La semana pasada Reuters publicó los resultados de su propio examen, que dejó al descubierto "graves deficiencias" en el caso contra los oficiales del Berkut. Cerca de 70 familias de las víctimas del Maidán siguen exigiendo "una investigación objetiva y minuciosa".
 

Masacre de Odesa



El 2 de mayo, la tragedia de Odesa dejó casi 50 muertos y unos 250 heridos. Los nacionalistas incendiaron un campamento de manifestantes y luego prendieron fuego a la Casa de los Sindicatos, donde activistas anti-Kiev quedaron atrapados en su interior.

Cinco meses después de esta tragedia, RT contactó con el Consejo de la UE para saber cómo progresaba la investigación. Ninguno de los responsables del crimen ha sido identificado.

 
Fosas comunes


 
En septiembre, las autoridades de Donetsk anunciaron que en todas las fosas comunes halladas en la región de Donbass encontraron 400 cadáveres, de los cuales 350 eran civiles. El forense jefe de Donetsk, Konstantín Guerasimenko, dijo a RT que "todas [las víctimas] presentaban múltiples disparos y tenían las manos atadas".

Maja Kocijancic, portavoz de la Comisión Europea, dijo a RT que era necesaria "una investigación independiente en consonancia con las normas internacionales y que incluyan el examen forense".

Kiev, sin embargo, se mostró renuente a unirse a la investigación iniciada por la OSCE. Al mismo tiempo, las autodefensas acusaron a Kiev de ignorar las propuestas para crear un comité internacional a tres bandas que también incluyera a expertos europeos.

Periodistas asesinados


 
Muy pocos detalles han salido a flote acerca de la muerte de cuatro periodistas rusos. El último en morir fue Andréi Stenin, reportero gráfico de la agencia internacional Rossía Segodnia, que falleció a causa de disparos efectuados por las Fuerzas Armadas de Ucrania.

Kiev ha hecho pocos esfuerzos para encontrar a los responsables.

Bombardeos de Lugansk y Donetsk



Al poner en marcha su 'operación antiterrorista' en Donetsk y Lugansk, Kiev ha desplegado la artillería pesada para atacar zonas civiles. Hospitales, escuelas y zonas residenciales se han convertido en blancos cotidianos de los ataques.

Sin embargo, Kiev sigue negado que sus fuerzas sean responsables de este tipo de incidentes y culpa en cambio a las autodefensas.

Según la ONU, desde abril hasta 18 de noviembre en el este del país, al menos 4.317 personas resultaron víctimas mortales y 9.921 heridos. En total, 466.829 personas fueron desplazadas.  
 

El siniestro del avión Boeing 777



El 17 de julio, en el sudeste de Ucrania se estrelló un avión Boeing 777 de Malaysia Airlines con 298 personas a bordo sin dejar sobrevivientes. El vuelo MH17 iba de Ámsterdam a Kuala Lumpur y la mayoría de sus pasajeros eran neerlandeses.

Desde las primeras horas de la catástrofe, Ucrania y otros países culparon por la tragedia a Rusia y a las autodefensas, sin presentar pruebas fiables.

La investigación del accidente continúa en curso, aunque Ucrania impide a los expertos internacionales el acceso al lugar del siniestro, al mismo tiempo que culpa constantemente a las autodefensas de hacer lo mismo.