El dirigente de la UPOEG, Bruno Plácido Valerio, confirmó a CNN México que podrían "existir más fosas", pero que hasta este martes solo pueden confirmar las tres ubicadas en las cercanías de Iguala, en el norte del estado de Guerrero.
Los miembros de la UPOEG se mantienen a la espera de los peritos de la Fiscalía General del Estado o del grupo de antropólogos forenses argentinos y los de la Procuraduría General de la República (PGR) para que hagan las excavaciones completas.
"Que los peritos sean los que busquen en las fosas para que nosotros no cometamos errores, que ellos hagan el trabajo profesional. Estamos pidiendo apoyo de los argentinos y del Gobierno pero no llegan", explicó a CNN el líder de la policía comunitaria.
El 4 de octubre, el procurador estatal de Guerrero, Iñaki Blanco, afirmó que 28 cadáveres habían sido recuperados de cinco fosas clandestinas y que harían falta al menos dos semanas para identificar los cuerpos mediante el ADN.
El 9 de octubre, el procurador general de México, Jesús Murillo Karam, confirmó el hallazgo en Iguala de cuatro nuevas fosas que, presuntamente, contienen más cuerpos calcinados.
El pasado 26 de septiembre estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa trataron de tomar varios autobuses en Iguala para utilizarlos en su protesta cuando un grupo de policías locales y de personas armadas desconocidas abrieron fuego contra ellos. Seis personas fallecieron, 17 resultaron heridas y 43 estudiantes permanecen desaparecidos. A la noche siguiente las autoridades detuvieron a 22 policías en calidad de sospechosos de homicidio, desapariciones y vínculos con el crimen.