Lavrov se mostró "convencido" de que los socios europeos de Rusia, así como una serie de políticos y empresarios extranjeros, "son conscientes de las actuales políticas perjudiciales destinadas a 'castigar' a Rusia".
"Pese a su actual orientación hacia Washington, la UE ha logrado convertirse en una estructura con un potencial acumulado para un 'juego independiente'. No obstante, este potencial casi nunca se utiliza. Es triste, porque la propia voz de la UE podría añadir equilibrio al debate internacional y a los esfuerzos para la solución de distintos problemas", destacó el canciller ruso.
"Relaciones con EE.UU. están en un callejón sin salida en varias direcciones"
Lavrov calificó las actuales relaciones con EE.UU. de "difíciles", ya que "las propuestas que los socios estadounidenses en su mayoría se centran principalmente en sus intereses unilaterales".
"Las relaciones son complejas, (…) y en varios campos ahora se encuentran en un callejón sin salida que se ha desarrollado mucho antes de la crisis ucraniana", dijo el diplomático ruso y añadió que "la actual agenda internacional está llena de enfoques contradictorios".
Por lo tanto, ambas partes tienen que encontrar "soluciones de compromiso" en una variedad de temas, incluyendo las negociaciones sobre la reducción de los arsenales de las armas estratégicas, la situación actual en Oriente Medio y el norte de África, el programa nuclear de Irán, y también la cuestión de la desnuclearización de la península coreana.
"Los problemas se han ido acumulando durante mucho tiempo, y no están disminuyendo. Ahora a esto se unió también la acumulación de la atmósfera negativa en el espacio público a través de las acusaciones a Rusia de todos los 'pecados' en relación con la crisis en Ucrania", puntualizó.
"Un rasgo característico de EE.UU. es el enfoque consumidor de las relaciones internacionales"
Lavrov también destacó "el enfoque equivocado" que tiene Washington en cuanto a las relaciones internacionales. "EE.UU. cree que el país tiene el derecho de castigar a los países que no actúan tal y como lo quiere Washington, y les obliga a la cooperación en asuntos vitales para EE.UU. y sus aliados. Este es un enfoque equivocado. Este enfoque imperial a los asuntos mundiales se corregirá, pero el proceso tardará mucho tiempo", indicó.
Rusia, por su parte, busca la cooperación "libre de ideología e intentos de sacrificar la economía por objetivos geopolíticos unilaterales dudosos".
El canciller recordó que actualmente "la situación en el mundo se ve afectada por las actividades de las organizaciones terroristas que proliferaron sobre todo después de la agresión del 2003 en Irak, cuando en ausencia de cualquier autorización del Consejo de Seguridad comenzó el bombardeo y la invasión del país".
Según sus palabras, ahora el país está bajo amenaza de perder la integridad y unidad territorial. Además, escenarios parecidos tuvieron lugar en Libia y Siria y "en las cenizas de esas 'victorias' aparecieron estructuras como Al Qaeda, Frente al Nusra, y ahora el Estado Islámico que representan una amenaza para todos".
"No podemos perder a Ucrania, ya que es nuestro pueblo más cercano"
Según declaró el ministro ruso de Exteriores, "Ucrania es un pueblo hermano y el más cercano" para los rusos, por lo que Rusia "no puede perderla" y "hace más que cualquier otro para que la crisis en el país esté resuelta".
El desarrollo de las relaciones entre los presidentes de ambas naciones confirma que "aún se puede encontrar una manera de salir de la crisis actual y ayudar a los hermanos ucranianos para que se pongan de acuerdo en cómo mejorar su país", dijo Lavrov.
"El proceso de la realización de los acuerdos de Minsk ya ha comenzado, algo que confirma el inicio de un diálogo nacional", señaló el canciller ruso.
"La OTAN, el 'Mr. No' colectivo"
Lavrov indicó que uno de los periódicos extranjeros le llamó 'Mr. No', ya que cree que la diplomacia rusa supuestamente dice 'no' a todas las propuestas. No obstante, los hechos demuestran lo contrario.
En particular, hace muchos años Rusia se ofreció a negociar y adoptar un tratado sobre la seguridad europea, "que codificaría en el plano político el principio de la indivisibilidad de la seguridad, cuando ningún Estado tiene el derecho a garantizar su seguridad a expensas de otros". Pero esta propuesta fue rechazada. "Resulta que los países de la OTAN que ni siquiera acordaron discutirla son el 'Mr. No' colectivo", sostiene el ministro.
Además, la propuesta del presidente Vladímir Putin del inicio de una discusión seria con la Unión Europea sobre la formación de un espacio económico y humanitario común desde el Atlántico hasta el Pacífico también recibió respuesta negativa.
"Estoy convencido de que si el tratado de seguridad europea hubiera sido acordado a tiempo y se hubiera formado un solo espacio económico y humanitario desde Lisboa hasta Vladivostok, no tendríamos los problemas que ahora han dado lugar a una profunda crisis de la condición de Estado en Ucrania", afirmó.