"Es la hora de admitir con honestidad que la sociedad israelí está enferma y que es nuestra obligación tratar esta enfermedad", dijo Rivlin, refiriéndose al sangriento verano pasado y la tensión entre judíos y árabes que "ha llegado a niveles sin precedentes".
"La epidemia de la violencia no está limitada a uno u otro grupo, se ha filtrado a todas las áreas", reza el comunicado de su oficina, destacando que "hay violencia en los estadios de fútbol, en círculos académicos, en hospitales y en escuelas".
Rivlin se preguntó citado por el diario 'The Jerusalem Post' "si no nos hemos olvidado de lo que es ser judío, sino si nos hemos olvidado de los que es ser humano".
"¿Nos hemos olvidado de lo que es hablar?", agregó instando a la academia a asumir el reto y a erradicar la violencia "que amenaza con dejar cicatrices en la imagen de Israel".