"Estas son las bombas que las fuerzas estadounidenses arrojaron para los partidos kurdos. Ahora son botines de guerra para los muyahidínes", afirma un activista del grupo yihadista.
Anteriormente, las Fuerzas Aéreas del Ejército de EE.UU. habían confirmado que un avión militar estadounidense había entregado armas, municiones y medicamentos a los defensores de Kobani, que lleva casi un mes sitiada por el EI.
Entre tanto, la lucha contra el EI en Irak y Siria ha costado a Washington y los países de la coalición hasta la fecha unos 424 millones de dólares, según el portavoz del Pentágono John Kirby.
Según los últimos datos, desde el inicio de los ataques de los yihadistas contra la ciudad siria, más de 650 personas han muerto, y casi 200.000 civiles se han visto obligados a buscar refugio en Turquía.