Los líderes de las repúblicas de Abjasia y Osetia del Sur, Serguei Bagapsh y Eduard Kokoity, respectivamente, se manifestaron al ritmo de la cumbia ante decenas de miles de personas. Ambos mandatarios realizaron su primera visita oficial a Nicaragua, que coincidió con la celebración del 31 aniversario de la Revolución Sandinista. El presidente Daniel Ortega, uno de los líderes del movimiento que derrocó a la dictadura en 1979, dio una cordial bienvenida a sus huéspedes.
Abjasia y Osetia del Sur fueron reconocidas por Rusia en agosto de 2008 después de un conflicto armado con Georgia. Nicaragua fue el segundo país que apoyó la soberanía de estas naciones. Les siguieron Venezuela y la isla de Nauru en el océano Pacífico, que también iniciaron relaciones diplomáticas con las repúblicas. El presidente abjaso, así como su homólogo suroseta, siguen luchando para conseguir más reconocimiento en la región latinoamericana.
El encuentro de estos tres líderes fue una buena oportunidad para que las naciones abjasa y suroseta y la población nicaragüense se conozcan mejor. Los ritmos caucásicos fueron seguidos por bailes latinos, y cada melodía dejaba entender el carácter de cada uno de los pueblos, que dieron inicio a una fructífera cooperación.
"Son relaciones de confianza y de apoyo mutuo. Nicaragua es un país muy bello, y además tiene muchas perspectivas. Estoy seguro de que se realizará un intercambio cultural intenso", dijo Bagapsh a los medios.
El presidente de Abjasia y su homólogo de Osetia del Sur atravesaron miles de kilómetros para hacer más fuertes los lazos que los unen con Nicaragua. Los jefes de estado sincronizaron sus relojes en lo que se refiere a la lucha contra el narcotráfico y el crimen organizado; y también se comprometieron a coordinar sus acciones en el marco global.
Tras afirmar nuevamente el sentimiento de amistad, los líderes participaron en la firma de numerosos acuerdos, el más importante de los cuales es el acuerdo general de amistad, cooperación, intercambio y entendimiento entre las tres naciones. También consiguieron avanzar en sus relaciones comerciales y económicas: rubricaron un convenio para iniciar una comunicación tanto marítima como aérea. Los ciudadanos de estas repúblicas caucásicas y los nicaragüenses no necesitarán visado para realizar viajes a sus respectivos territorios.
Además, se promoverán intercambios de científicos, expertos y estudiantes de los países firmantes de estos acuerdos y se impulsará la cooperación en los ámbitos de la cultura, la educación y las artes.
Igualmente, las naciones se comprometen a cooperar en la lucha contra la delincuencia, el terrorismo, el narcotráfico y el crimen organizado.
Las relaciones entre Abjasia, Osetia del Sur y Nicaragua han pasado a un nuevo nivel, de las palabras a las acciones concretas. Firmando convenios en todos los sectores, los líderes de estos países dieron un ejemplo de colaboración mutuamente provechosa, lo que podría impulsar a otros estados para que reconozcan la independencia de estas repúblicas caucásicas.