"La búsqueda del submarino ruso en Suecia aumenta la tensión en la región"

El portavoz del Ministerio de Defensa de Rusia, Ígor Konashenkov, afirmó que las acciones de las autoridades militares suecas, que buscan un enigmático submarino ruso, amenazan con socavar las actividades económicas marítimas en el mar Báltico.
La decisión de las autoridades suecas de lanzar una nueva fase en la operación para encontrar un submarino extranjero en aguas territoriales del país está aumentando la tensión en la región, pero los intentos de encontrar una "huella rusa" no conducirán a nada, señaló el portavoz del Ministerio de Defensa de Rusia. 
Los intentos de Suecia de encontrar una "huella rusa" en el mar Báltico no conducirán a nada  

"Debido a la continua especulación por parte sueca sobre la supuesta detección de un submarino ruso cerca del archipiélago de Estocolmo, esperamos con impaciencia el momento culminante de una operación fascinante", ironizó Konashenkov, informa RIA Novosti. 

Suecia ha pasado a la siguiente fase de la operación, extendiendo la zona de búsqueda, que ya se está realizando desde tierra y aire.  

"Este tipo de acciones sin fundamento del Ministerio de Defensa de Suecia, caldeado por una retórica como de la guerra fría, hoy solo conducen a una escalada de la tensión en la región. Eso puede acabar no en el aumento de la seguridad de un país, sino socavando las bases de las actividades económicas marítimas en el mar Báltico", según el Ministerio de Defensa.  
 
El sábado 18 de octubre, el periódico sueco 'Svenska Dagbladet', remitiéndose a fuentes propias, escribió que entre las islas del archipiélago de Estocolmo se había hallado un submarino ruso posiblemente averiado. El contralmirante de la Marina sueca, Anders Grenstad, no pudo confirmar la información sobre el submarino cerca de la costa sueca. Las Fuerzas Armadas de Suecia están realizando desde el 17 de octubre una operación "analítica" de gran escala en el mar Báltico al que Rusia también tiene salida: han desplegado aviones, barcos de guerra y 200 efectivos en el archipiélago de Estocolmo.