La India, la última en reír ante el 'club de la élite espacial', tras el fallo del Antares

La explosión del cohete portador estadounidense Antares el pasado martes le ofreció una oportunidad revanchista ideal a la India, que esta última no dejó escapar.
El pasado 24 de septiembre el joven programa espacial indio hizo un avance histórico, cuando su sonda alcanzó el campo gravitacional de Marte, convirtiendo al país en la cuarta nación en orbitar el planeta rojo.

El diario estadounidense 'The New York Times' marcó el evento con una viñeta estereotípica, tachada por muchos como "racista". 

Some condescension from the NYT to brighten up your morning. Don't miss the cow, that most original of India motifs! pic.twitter.com/T6U4CxRrVd

— Samanth Subramanian (@Samanth_S) septiembre 29, 2014

'The India Times' inmediatamente se hizo eco, parafraseando al primer ministro Narendra Modi quien deseó "que EE.UU. deje de creer que somos una tierra de encantadores de serpientes, pero considerando la viñeta política publicada por 'The New York Times' debe pasar algún tiempo antes de que esto suceda".

El rotativo indio sostuvo entonces que la India es el primer país en orbitar Marte en el primer vuelo y que lo hizo gastando mucho menos que otras potencias.

"Tenemos un par de cosas que enseñar a este 'club de la élite espacial', quienes, juzgando por la imagen, son un grupo de pesados carrozas xenófobos", concluyó entonces el periódico agriamente.   

Ahora que el cohete Antares explotó durante el lanzamiento, la India tiene un par de cosas que enseñar a los caricaturistas occidentales.

While NYT cartoon was racist, this is a brilliant retort by Hindustan Times. Take a bow. pic.twitter.com/BZe066ag3y

— blog link in bio (@indiantweeter) octubre 30, 2014
 

Mientras, la reacción a la viñeta de 'The New York Times' produjo tal escándalo, que hasta el editor de portada Andrew Rosenthal tuvo que pedir disculpas en Facebook a los "lectores que se hayan ofendido por la elección de imágenes", diciendo que el caricaturista singapurense Heng Kim Song "no intentaba desafiar a la India, su Gobierno o ciudadanos".