Mas ha restado importancia a la denuncia presentada por Unión Progreso y Democracia (UPyD) esta misma mañana contra él por desobediencia y prevaricación al celebrar la consulta. "No me preocupa en absoluto. Ladran, luego cabalgamos. No me amedrentaré", espetó.
Queremos votar la consulta definitiva y con todas sus consecuencias; nos lo hemos ganado
El partido UPyD presentó este domingo una segunda denuncia ante un juzgado de Barcelona contra el presidente catalán, Artur Mas, por celebrar la consulta pese a su suspensión y exhortó a la Fiscalía parar el proceso.
La querella, que exige detener a los autores de la consulta, va dirigida también contra Irene Rigau, consejera de Educación del Govern, y Ramón Espadaler, responsable de Interior.
A los tres se les acusa de la omisión de perseguir delitos "y a todos sus cómplices, cooperadores necesarios, encubridores y coautores".
Se solicita también al Ministerio Público que ordene a las Fuerzas de Seguridad del Estado que procedan al "desalojo y cierre" de los centros de votación habilitados "con el uso proporcional de la fuerza si fuera menester en caso de resistencia".
Este domingo los catalanes votan en una consulta independentista que, a pesar de no ser oficial y no tener carácter vinculante, estará cargada de tensión ante la incertidumbre de sus posibles repercusiones.