Vladímir Putin y Xi Jinping están construyendo un nuevo orden mundial

Las relaciones económicas y políticas entre Rusia y China se fortalecen, y en este acercamiento los contactos personales entre el presidente ruso, Vladímir Putin, y el mandatario chino, Xi Jinping, tienen un papel destacado.
La visita de Vladímir Putin a China en el marco de la cumbre de la APEC se convirtió en la quinta ocasión en lo que va de año para que el líder ruso se reuniera con Xi Jinping y firmara varios acuerdos importantes, escribe el periódico ruso 'Vzgliad'. Durante los últimos nueve meses los mandatarios de Rusia y China se encontraron en Shanghái y Sochi, en Brasil y Tayikistán. Durante el año pasado, los dos presidentes se reunieron tres veces, pero hay que recordar que Xi fue elegido como presidente chino solo el pasado marzo y que inmediatamente emprendió una visita a Moscú.
 
Los contactos entre los líderes de Rusia y China no solo se han hecho más frecuentes, sino también más productivos; por ejemplo, en la cumbre de la APEC Pekín y Moscú firmaron un memorando histórico de cooperación según el cual Rusia suministrará gas natural a China. Putin y Xi mencionan constantemente el carácter amistoso de las relaciones entre ambos países y de la intensificación de la interacción estratégica. Asimismo, también ponen cada vez más énfasis en el hecho de que los dos países han acordado una línea en los asuntos mundiales "para mantener la paz en el marco del derecho internacional con el fin de hacerlo más estable" (de acuerdo con Putin) y "para proteger conjuntamente el orden mundial de posguerra" (según Xi).
 
Todo el mundo entiende cuál es el trasfondo de esas palabras: ninguno de los dos países está dispuesto a permitir que EE.UU. les dicte su voluntad; es más, han iniciado su rumbo hacia un nuevo mundo multipolar. El diario subraya que el giro de Rusia hacia China no se produjo después de la crisis de Ucrania, sino que solo después de que EE.UU. tratara de aislar a Rusia y de deteriorar sus relaciones con la UE se aceleró el acercamiento entre Moscú y Pekín. Sin embargo, la cooperación económica entre ambos países ha estado desarrollándose progresivamente durante los últimos quince años, y los lazos políticos se han reforzado cuando Rusia ha empezado a defender sus intereses nacionales. Precisamente el fortalecimiento de Rusia fue el factor determinante para que China se mostrara favorable al acercamiento, cree el rotativo.
 
La buena sintonía entre Putin y Xi refleja que los intereses de ambos países son muy parecidos. Simplemente por ser vecinos Rusia y China están destinadas a mantener una relación estrecha y mutuamente beneficiosa. Pero además la situación internacional obliga a Rusia y China a librar una lucha geopolítica, económica e ideológica para establecer un nuevo orden mundial.