El canciller ruso Serguéi Lavrov y su homólogo alemán Frank-Walter Steinmeier, convocaron a una rueda de prensa este martes tras mantener un encuentro en Moscú.
Según el canciller ruso, si bien los acuerdos de paz firmados en Minsk "no son ideales", son "los único que estan dispuestos a firmar y han firmado todas las partes clave: Las dos partes ucranianas, la UE, EE.UU. y Rusia". "Si todos fuimos sinceros [cuando los firmamos], vamos a procurar el cumplimiento de estos acuerdos, en vez de iniciar escándalos sonados, echando la culpa a otros por socavarlos", agregó.
Según él, "las conversaciones en Minsk sobre Ucrania son de formato único”, y solo así “están representadas ambas partes del conflicto, así como Rusia y la OSCE”, razón por la que sugiere "seguir con él".
El proceso de la construcción del diálogo constitucional en Ucrania "no solamente no fue iniciado, sino que, al parecer, ni se planea", recalcó Lavrov. "La discusión sobre la Constitución está prevista en la Rada Suprema sin ninguna participación de las regiones ucranianas", explicó.
Lavrov reiteró que Rusia contribuirá a crear de condiciones favorables para el diálogo entre Kiev y el sureste de Ucrania. Según él, después del alto del fuego y de las acciones hostiles, será necesario dedicarse al desarrollo de los vínculos económicos y políticos, como lo presuponen los acuerdos de Minsk.
A su vez, el canciller alemán dijo que el conflicto ucraniano es una crisis seria que amenaza la paz europea y declaró que su país propone un diálogo directo entre la UE y la Unión Económica Euroasiática que incluya la discusión sobre Ucrania.