El representante oficial del Ministerio ruso de Exteriores, Alexander Lukashevich, declaró que la cancillería expresa su protesta por los ataques militares ucranianos contra la misión de la OSCE.
"Estos casos son indignantes. Expresamos categóricamente la protesta por esta situación, teniendo en cuenta que la parte receptora está obligada a proporcionar todas las condiciones de seguridad necesarias para el movimiento y el trabajo de los observadores internacionales", dijo Lukashevich en una rueda de prensa en Moscú.
De acuerdo con el informe de la misión de la OSCE, uno de los soldados disparó dos veces en dirección a la caravana de la OSCE. Las balas impactaron a unos 2 metros del coche de los observadores. Por razones de seguridad, los representantes de la Misión de Observación Especial abandonaron el lugar inmediatamente.
Según el diplomático ruso, las autoridades ucranianas complican cada vez más el trabajo de los observadores internacionales, lo que -dijo- "absolutamente no se corresponde con las garantías que se les dio a los observadores al inicio de la misión". “Esperamos que la misión también responda a estos incidentes inaceptables", dijo Lukashevich.
El diplomático también subrayó que Rusia aún tiene muchas preguntas sobre la organización de la investigación internacional del accidente de Boeing en Ucrania. "Necesitamos tomar medidas activas y vigorosas para establecer las causas de la tragedia y detener a los responsables, así como para evitar sucesos similares en el futuro", aseguró el representante del Ministerio.
El diplomático subrayó también que la tragedia de Boeing es utilizada por determinados círculos para aumentar la tensión internacional y apoyar el régimen de sanciones contra Rusia.
Según el portavoz el envío posible de arma letal estadounidense a Kiev sería una clara violación de los acuerdos de Ginebra.