"Me amenazaban que me iban a desaparecer como a los de Ayotzinapa. Me dijeron que me iban a violar. Me golpearon en el rostro, en la espalda y el pecho. Me trajeron dando vueltas por todo el centro histórico; cuando subió otro sujeto, me agarraron las piernas y empezaron a golpear en la cara repetidas veces. Me pidieron que les diera la contraseña de mis redes sociales, me obligaron a teclearla en su celular. Empezaron a investigar a varias personas y me pidieron nombres. Dijeron que mañana van a levantar a más personas", manifestó Bucio.
Acerca de sus agresores Sandino Bucio declaró que se trata de "una maquinaria del terror que tiene el Gobierno Federal para meter miedo en todos los jóvenes, en todos los que se movilizan por un mundo mejor, son sus mecanismos de asustar a la población". "El día de hoy me tocó a mí, ya les pasó a otros compañeros en situaciones parecidas, pero no podrán agarrar a todos los que están luchando por que este país cambie. Somos miles, no nos podrán levantar a todos", subrayó el activista.
"No sé a dónde me hubieran llevado si no hubiera habido tanta presión de la gente", concluyó el activista.
El representante de Sandino Bucio ha declarado que las autoridades quisieron fabricarle un delito que no cometió, el delito de llevar en su mochila un explosivo. "Basta que los policías federales y locales de la ciudad y de todos los estados estén fabricando los delitos a los jóvenes estudiantes", insistió.
Sandino Bucio, destacado activista del movimiento #YoSoy132, fue secuestrado en la colonia Copilco de DF en pleno día el pasado 21 de noviembre por individuos armados, uno de los cuales vestía una franela negra con la insignia 'Policía Federal', informa Telesur.