Durante la próxima visita de funcionarios de la UE a Ankara, Bruselas tratará de convencer a las autoridades de Turquía para que se sumen a las sanciones europeas contra Rusia, informa la agencia Reuters. La delegación europea tambien pretende persuadir a Turquía de que no aproveche la situación, beneficiándose indirectamente mediante la exportación de bienes a Rusia, ya que Moscú prohibió la importación de productos agrícolas de los países de la UE en respuesta a las sanciones.
Durante la visita oficial a Turquía, funcionarios de la UE planean discutir la cooperación con Turquía en la lucha contra la organización yihadista Estado islámico y otros grupos radicales. Turquía es una zona de tránsito para los europeos que acuden a Oriente Medio a luchar al lado de los grupos extremistas.
Funcionarios europeos planean negociar con las autoridades turcas para que les ayuden a identificar a combatientes extranjeros, así como a garantizar la seguridad de la aviación. De acuerdo con un comunicado de la Comisión Europea, con esta visita Bruselas pretende subrayar la importancia de Turquía para la UE como un país socio clave.
La visita se produce días después de que la empresa rusa Gazprom cancelara el proyecto South Stream de 63.000 millones metros cúbicos para suministrar gas al sur de Europa a través de Bulgaria, miembro de la UE, y anunciara un nuevo proyecto de gasoducto a través de Turquía y de Grecia.