El legendario cineasta de Hollywood James Cameron, director de 'Terminator', 'Titanic' y 'Avatar', celebró su 56 cumpleaños en las profundidades del lago ruso Baikal. Se sumergió en el fondo del lago siberiano, el depósito más grande del mundo de agua dulce, en el batiscafo Mir, pilotado por Anatoli Sagalévich, presidente de la Fundación de Protección del Baikal (FPB).
Pasó bajo las aguas unas 4,5 horas y llegó hasta los 1.380 metros de profundidad. Al subir a la superficie, recibió el certificado de 'hidronauta' por parte de la FPB, la organización científica que se dedica a explorar el lago.
No es la primera vez que Cameron aprovecha las capacidades técnicas de estos 'submarinos' rusos: durante el rodaje de ´Titanic´ exploró el fondo del Atlántico mediante una incursión subacuática en el Mir.
Por el momento, los medios de comunicación publican todo tipo de versiones sobre los motivos que ha tenido el cineasta para volver a recurrir a los famosos batiscafos.
Versión № 1: la experiencia contribuirá en la nueva película de Cameron, 'The Dive'. Su estreno está programado para el año 2012. La obra trata la historia de unos buceadores franceses, los esposos Audrey Mestre y Pipin Ferreras: buscando batir el récord de mayor profundidad en buceo libre en 2002, Mestre perdió la vida.
Versión № 2: James Cameron, que fue al Baikal en visita privada por una invitación personal de Anatoli Sagalévich, siempre se ha interesado por las formas de vida marítima y las ha presentado en muchas de sus obras: 'Piranha II: The Spawning' (1981), 'The Abyss' (1989) o 'Titanic' (1997)… Por eso decidió celebrar su cumpleaños explorando la línea costera del Baikal junto a los científicos rusos. O, a lo mejor, esperaba descubrir algunas especies no conocidas aún: según datos de la Academia de Ciencias de Rusia, debido al alto contenido de oxígeno en todas las capas del agua, en el lago siberiano habitan 2.630 especies y taxones infraespecíficos (subespecies) de plantas y animales, dos tercios de las cuales son endémicas, es decir, no es posible encontrarlas de forma natural en ninguna otra parte del mundo.
Versión № 3: James Cameron tiene una fama de ambientalista activo: por ejemplo, participó en protestas contra la construcción de la central hidroeléctrica de Belo Monte, la tercera mayor del mundo, en las orillas del río Xingú, en el Estado de Pará, Brasil. El proyecto provoca la crítica de las organizaciones medioambientales ya que supone la inundación de 500 kilómetros cuadrados de terrenos agrícolas y forestales, impactando directamente en el área indígena de Paquiçamba de la etnia Juruna.
Se cree que con el 'acto' simbólico de celebrar su cumpleaños en el Baikal, el famoso defensor de los derechos de la naturaleza quiso atraer la atención pública a los problemas de la contaminación de las aguas del lago. Desde 1966 en su orilla funciona una fábrica que produce papel, cartón y celulosa. Según los datos de World Wide Fund for Nature, WWF (Fondo Mundial para la Naturaleza), entre los años 1999 y 2007 el volumen de vertidos al lago alcanzó entre los 36,8 y los 48,2 millones de toneladas anuales. Mientras tanto, se informa de que la concentración de algunas sustancias tóxicas en estas 'aguas negras' supera la norma en 12 veces.
En 2008 en la planta lanzaron un nuevo sistema de purificación de los vertidos, pero esto perjudicó los ingresos de la fábrica ya que no permitía producir el producto más demandado y más rentable: la pulpa de celulosa del sulfato blanqueada.
En 2010 la planta abandonó las prácticas ecológicas, lo que provocó una oleada de protestas por parte de los defensores del medio ambiente en febrero y marzo de este año. En julio, mientras realizaban labores de exploración de las aguas del lago, los Mir descubrieron a una profundidad de 33 metros, en el brocal de salida de la fábrica, unos compuestos de cloro peligrosos.
La Unesco declaró en 1996 al lago Baikal Patrimonio de la Humanidad. Es el lago más profundo de la Tierra: su profundidad máxima, de 1.642 metros, fue descubierta en 1983, introducida en los mapas en 1992 y confirmada en 2002 en el marco de un proyecto batimétrico conjunto ruso, belga y español.
Los científicos no son unánimes acerca de la edad del lago. Según una de las versiones, tiene entre 25 y 35 millones de años; mientras que la última hipótesis, presentada en 2009 e indirectamente confirmada durante la segunda etapa de las labores de los Mir en la zona, afirma que la línea costera contemporánea tiene unos 8.000 años y la parte abisal, 150.000 años. Las primeras poblaciones rusas aparecieron en la orilla a finales del siglo XVII o a inicios del XVIII.
La primera inmersión tripulada al fondo del Baikal tuvo lugar en 1977: un batiscafo de producción canadiense, Pisces, llegó a una profundidad de 1.410 metros.