Las condenas por abusos sexuales a menores en EE. UU. provocan indignación
El gran número de abusos sexuales a menores en Estados Unidos y las condenas consideradas insuficientes, provocan indignación en amplios sectores de la sociedad. El caso del millonario Jeffrey Epstein, que cumplió una leve condena por pederastia, indignó a muchos ciudadanos del país.
Epstein, residente de Palm Beach de 57 años, recientemente fue puesto en libertad tras cumplir una condena de 13 meses en prisión por abusar de una menor. Muchos estadounidenses piensan que es una pena demasiado corta para un delito tan grave y que en la actual legislación estadounidense en esta materia todavía existen carencias.
Según afirma a RT la escritora y productora independiente Conchita Sarnoff, la razón principal por la cual ese caso ha causado tanta indignación pública es la falta de imparcialidad. En algunos casos las personas que cometen parecidos delitos reciben unos castigos mucho más severos, por no disponer de recursos económicos para pagar una defensa de nivel.
La escritora señala que en EE. UU. ya existen leyes contra los abusos sexuales y el tráfico sexual de menores de edad, pero el problema es que en algunos estados tal legislación todavía no funciona bien. Otro problema es que varios estados no reconocen la diferencia entre la prostitución infantil y el tráfico de menores.
Recientemente la organización Human Rights Watch publicó un informe en el que indica que las mujeres inmigrantes indocumentadas también corren el riesgo de sufrir abusos sexuales cuando se encuentran en los centros de detención de EE. UU.