Revive el arte ecuestre ruso en el Kremlin
Profesionales del más alto nivel del arte ecuestre egresan del mejor centro de preparación de jinetes de Rusia: la Escuela de Equitación del Kremlin. En ella se forja una relación de amistad entre los equinos y sus jinetes.
Confiar la vida y la profesión a un caballo es una acción muy arriesgada. Pero sin ello sería imposible la existencia del emocionante espectáculo de este arte. Semejante relación no se forma en un solo día. Para alcanzar este nivel de perfección, los artistas, tanto hombres como caballos, tienen que practicar y ensayar durante muchos años.
Los entrenamientos en la escuela son diarios y muy intensos. Como los caballos son animales bastante asustadizos, parte del entrenamiento consiste en acostumbrarlos a todas las situaciones estresantes que pueden surgir durante las actuaciones, como las luces de las cámaras o los aplausos de los espectadores.
Los entrenadores de la escuela afirman que la equitación no es sólo un trabajo para ellos: es un estilo de vida. El secreto de la maestría de los jinetes está en su absoluta dedicación al oficio. Todos los esfuerzos y traumas se olvidan pronto, todo queda atrás con el calor de los primeros aplausos de los admiradores.
“La fuerza física no es lo más importante para manejar a un caballo", dice el instructor Pável Polyakov. "Lo esencial es entrar en contacto con él. Si hay un entendimiento mutuo, sin duda habrá buenos resultados. Este entendimiento proviene del gran cariño que reciben los animales en la escuela. Una buena comida y baños con agua caliente seguidos por rayos UVA convierten a este sitio en un verdadero balneario para los equinos”.
El entrenador de equitación Klementiy Plajatnyuk comenta: “Lo que trae a la gente aquí es la necesidad de adrenalina. Tienen espíritu guerrero. Este oficio sirve para perfeccionarse y también para ver lo que vales. Poca gente se atreve a saltar sobre el fuego estando de pie en un caballo. La escuela persigue un objetivo: hacer renacer la cultura nacional militar cuyas raíces son muy profundas. Los ejercicios que se hacen son iguales a las maniobras que realizaban los jinetes de la caballería rusa. Este arte casi quedó en el olvido y ahora lo estamos recuperando a base de materiales de archivo”.
Cabe destacar que el arte ecuestre ruso tiene una larga historia. En Rusia se crearon muchas razas de caballos, incluso cuenta con un estilo de equitación propio. Actualmente existen aproximadamente 90 granjas equinas y hay 33 hipódromos en funcionamieto. Son bastante frecuentes las exposiciones sobre varios temas relacionados con los equinos, entre ellas la Exposición nacional de caballos EQUIROS 2010, que se celebró el 21 de agosto pasado.