Millares de ciudadanos han participado en las manifestaciones en Washington y otras ciudades de Estados Unidos. Los seguidores del Partido Republicano quieren demostrar así su oposición a las políticas de Barack Obama. A los manifestantes no les parece satisfactorio el estado de la economía y tampoco están de acuerdo con las inversiones acometidas por el Gobierno. La muchedumbre ha desfilado por las calles más céntricas de las principales ciudades del país con pancartas que llevan inscritos eslóganes como “Paren a Obama”, “Basta de gastar nuestro dinero” y “No soy su cajero automático”.
La marcha 'Tea Party' en la capital fue patrocinada principalmente por FreedomWorks, un grupo conservador que encabeza el ex jefe de la bancada republicana en el Congreso Dick Armey, de Texas.
"Nos reunimos para recordarle al Congreso y al presidente que estamos hartos de las políticas que aumentan el intervencionismo del Gobierno y sus gastos", afirma Brendan Steinhauser, un portavoz de FreedomWorks.
Hace algunas semanas se ha iniciado la campaña electoral para el Congresso. Los republicanos afirman que los demócratas, encabezados por Obama, no logran combatir de manera efectiva el desmpleo y los 'agujeros' presupuestarios que descontrolan el déficit y esperan que a traves de las manifestaciones promovidas por el 'think tank' ultraconservador conocido como Tea Party puedan conseguir hacerse con la mayoría en el Congresso.
Según los medios estadounidenses, un 60% de la población considera que el país se encuentra en un estado de depresión, un 46% está a favor de las medidas emprendidas por el presidente y un 53% están dispuestos a votar por los republicanos.
El 2 de novembre EE. UU. vota para elegir a los nuevos representantes en el Congreso y el Senado.