El próximo 28 de septiembre tendrá lugar en Corea del Norte un congreso del Partido de los Trabajadores, con objetivo de elegir al nuevo líder.
La reunión previamente fijada para el comienzo de este mes fue retrasada por razones poco claras. Esto dio lugar a especulaciones que variaban entre las graves inundaciones -que quitaron la vida a decenas de norcoreanos y dejaron a miles sin techo- y el estado de salud de Kim Jong-Il.
Algunos medios atribuían el retraso a posibles desavenencias por el liderazgo del partido, pero el hecho no ha sido comprobado. Durante los encuentros preparatorios de los delegados del partido en todo el país, Kim Jong-Il fue elegido por la “voluntad unánime de todos los miembros”.
Los oradores en las reuniones del Partido Comunista en diferentes ciudades y pueblos norcoreanos han subrayado que Kim Jong-Il “es hoy día el más alto representante de la RPDC, el símbolo de la dignidad, la fama y la invencibilidad de su ejército y su pueblo”.
De cara al congreso, el actual líder de Corea del Norte revisó diferentes objetivos económicos del país y declaró que el gobierno debe reformar el área de la administración de las empresas industriales y aumentar su rentabilidad económica.
Ésta será la primera reunión del Partido de los Trabajadores desde 1980, cuando Kim Jong-Il fue promovido como sucesor de su padre Kim Il-Sung. Finalmente se convirtió en líder del país en 1994, después de su muerte. Durante su mandato, este país considerado el más cerrado del mundo se ha aislado aún más del resto.
Muchos observadores creen que esta reunión partidaria servirá para designar oficialmente como nuevo líder de Corea del Norte al hijo menor de Kim Jong-Il, Kim Jong-Un, de 27 años de edad. Con esta edad el actual líder ya participaba “en la actividad revolucionaria para el bien de su país”.
Sin embargo, esta información no fue confirmada durante la visita del secretario general del Partido de los Trabajadores a China, este mes.
Sea como sea, la administración del país se basa en un sistema hereditario y según la política del Partido, la mejor forma de preservar el régimen es transmitir el poder del padre al hijo.
El cambio de liderazgo en Corea del Norte se realiza tras una situación difícil en la península. La relación entre Seúl y Pyongyang se ha agravado aún más en el último marzo, después del hundimiento de la corbeta surcoreana Cheonan. Corea del Sur acusa a su vecino de lo que ocurrió, pero RPDC niega cualquier participación en el hecho.
Actualmente la península coreana todavía se encuentra en guerra. En 1953 los países firmaron no un tratado de paz, sino sólo de armisticio.