Esta semana altos cargos pakistaníes y oficiales de la inteligencia europea restaron credibilidad a la alerta de amenaza terrorista en Europa que difundió la Casa Blanca. Según dijeron, esto pudo ser una estrategia para satisfacer los intereses de Estados Unidos en perjuicio de otros. Algunos analistas opinan que EE. UU. ondea la bandera de la amenaza terrorista cuando conviene a sus intereses.
Frederick William Engdahl, historiador y economista investigador explica por qué el contingente de las tropas aumenta en Afganistán:
"Creo que la razón principal del aumento de las tropas extranjeras en Afganistán, es la posibilidad de tener un mayor control sobre el tráfico de drogas que va de Asia Central a Rusia y a Europa Occidental. Porque no existe una justificación militar, sino que esto sirve de plataforma de ensayo dirigida en contra de futuras actividades de China y Rusia. Así que la misma idea de la guerra, de que los soldados norteamericanos y los efectivos de la OTAN brinden alguna estabilidad en Afganistán, es de risa".
"El término más conveniente para denominar a Al Qaeda sería el de truco, porque es algo creado por los norteamericanos para usarlo como si fuera un espantapájaros cuando sea propicio, sobre todo cuando EE. UU. tiene problemas para involucrar a otros países en sus guerras, es una forma de tener un dominio sobre los demás. Los expertos en inteligencia alrededor del mundo dicen que el núcleo del terrorismo tiene raíces estatales".
"Así que hay que preguntarse quién es el que saca más ventaja sobre la constante alerta de ataques de Al Qaeda por aquí y por allá. Y parece ser muy oportuno que los usen cuando Europa expresa dudas sobre el carácter racional de la misión de la OTAN en Afganistán, cuando surgen estas alertas sobre futuros ataques y las únicas fuentes de esta información son expertos de la inteligencia estadounidense. Los comandantes de la OTAN están promoviendo la agenda del Pentágono, que tiene poco que ver con los talibanes y Al Qaeda. La presencia de las tropas aliadas no ha conseguido nada en relación a convertir el mundo en un lugar más seguro y claro, tampoco han estabilizado la situación dentro de Afganistán".
"Yo tengo amigos que me envían informes de primera mano sobre lo que sucede allí. EE. UU. respalda al gobierno de Karzai, que es el mayor caudillo militar y que maneja el opio del planeta y el 93% de toda la heroína. Este escenario se hizo realidad y se fomentó tras la ocupación norteamericana en 2001. Hay que preguntarse, cuando la línea oficial de EE. UU. no supone la destrucción de los campos de amapolas y de opio en Afganistán, algo que sí hicieron los talibanes, ¿qué es lo que pasa aquí?. ¿Será otro Vietnam donde la CIA opera los campos de opio para financiar al terrorismo e incitar a la guerra en Camboya y Laos? ¿Se puede hacer lo mismo en Kirguistán? Me parece que son preguntas muy importantes que tienen que ser examinadas".
"Creo que ni el segundo advenimiento de Cristo podría garantizar a Obama un segundo mandato. Ni la retirada de las tropas tendrá algún afecto pensando en eso. Pero esto nunca tendrá lugar. El Pentágono tiene alrededor de 50 bases permanentemente desplegadas que construyeron en todo el país y la mayor parte de ellas son bases militares áreas para controlar a China, Asia Central, Rusia y Kazajistán, para vigilar las rutas de oleoductos".