El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, afirmó que está dispuesto a parar las construcciones en Cisjordania si los palestinos reconocen a Israel como Estado del pueblo judío.
Comentando la apertura de la sesión invernal del Parlamento Israelí, Netanyahu dijo: "Si el liderazgo palestino dice a sus ciudadanos que reconocen inequívocamente a Israel como el hogar de los judíos, estaré dispuesto a reunir a mi gabinete de ministros y les pediré una nueva moratoria de la construcción".
La respuesta palestina ha sido de rechazo a esta propuesta, señalando que esto menoscabaría los derechos del 20% de la población israelí no judía y anularía el derecho de los refugiados palestinos a regresar a Israel.
El diálogo directo entre Palestina e Israel, reiniciado a principios de septiembre, ahora se encuentra en el límite del fracaso. "El liderazgo palestino pone toda la responsabilidad del fracaso de las negociaciones en Netanyahu", afirmó Mahmud Abbas. Los oficiales palestinos afirman que reiniciarán las negociaciones sólo si Israel anuncia una extensión de la moratoria a la construcción de colonias judías en Cisjordania, que impuso en noviembre pasado por diez meses.