Hoy empieza en Rusia el 10º censo nacional en los últimos 113 años: el primero tuvo lugar en 1897 y el último en 2002. La historia de los padrones en el país está llena de hechos tanto curiosos, como dramáticos.
ÉPOCA PRE-SOVIÉTICA: el censo de 1920
Al llegar los bolcheviques al poder en 1917, Lenin no tardó en proclamar su famoso lema: "Bolchevismo es registro". El primer intento soviético del censo tuvo lugar en 1920 en plena guerra civil entre los Rojos, los Blancos y los bandidos contra todo el mundo. En el ambiente general de hambruna, caos y guerrillas locales los registradores fueron atacados por las tropas blancas, por agrupaciones criminales y también por la población.
Al parecer, la imaginación humana no evolucionó mucho en los 23 años que habían pasado desde el censo nacional realizado en la Rusia zarina en 1897: en varios pueblos en los alrededores de Kazán (una ciudad a orillas del río Volga, actualmente la capital de la República de Tatarstán en la Federación Rusa) los campesinos desnudaron a los funcionarios porque pensaban que eran diablos y tenían colas (la versión de 1897 era que el censo era una señal del Advenimiento del Anticristo); aldeas enteras rechazaron suministrar datos para el censo porque pensaban que su propósito era mandar a las mujeres que sobraran a Alemania (cambió el destino: Alemania en vez de Besarabia en 1897, pero no la idea).
El censo de 1920 no pudo completarse ya que la guerra civil impidió a los registradores explorar un 70% del territorio del país.
ÉPOCA SOVIÉTICA: el censo de 1926
No fue hasta 1926 que las autoridades soviéticas consiguieron efectuar un censo nacional completo. Fue entonces cuando se elaboraron los principios científicos básicos para todos los censos posteriores.
Algunos datos registrados del padrón de 1926 también han sido bastante impactantes. Las cuestiones acerca del estado civil, la vivienda y la edad (una vez más, cuando se trataba de las mujeres) resultaron ser las más problemáticas.
En los periódicos locales de entonces se podían encontrar varios ejemplos:
"Según los registradores, el censo en Leningrado (nombre soviético de San Petersburgo) se realiza sin obstáculos, la gente está bien informada. Sin embargo, muchas mujeres en ausencia de sus maridos no son capaces de decir dónde trabajan sus esposos.
Los funcionarios han descubierto a muchas familias con dos esposas: la oficial y la civil, y cada una de ellas busca probar a los registradores que ella es la verdadera. Algunas incluso van a las oficinas del padrón para reclamar que no les han identificado en los formularios como esposas".
Las mujeres divorciadas o no casadas pero con hijos que vivían de pensiones alimentarias de sus ex maridos o de sus propios salarios, en la mayoría de los casos pedían que les inscribieran como 'señoritas'.
Los hombres con varias esposas como, por ejemplo, los tártaros musulmanes, temían ser perseguidos y ocultaban a las mujeres. En muchas ocasiones, según testimoniaba el periódico Pravda en 1926, contestaban: "Soltero, pero tengo una compañera".
Intentando registrar a los vagabundos, los funcionaros también se enfrentaron a muchos problemas a causa de numerosos temores: en Leningrado, por ejemplo, un intento de realizar el censo en los refugios fracasó porque en todos estos hospedajes nocturnos descubrieron tan sólo a 5 personas, y éstas mostraban un grado extremo de embriaguez y no se podía obtener de ellos ni una sola palabra descifrable.
En la ciudad de Dnipropetrovsk (ciudad ucraniana a orillas del río Dnieper, famosa por sus minas de carbón) uno de los intentos de censurar a los niños de la calle que residían en las ruinas de un edificio terminó en una ráfaga de piedras lanzada a los funcionarios.
Otro grupo de registradores consiguió recoger datos personales de los niños que habitaban en las acumulaciones de residuos de carbón gracias a que hicieron un tratado con el 'capo' de la banda, un chico de 15 años de edad que les garantizó la seguridad y les invitó a ir por la noche, cuando "los pillos vuelven al 'campamento' a dormir".
Los formularios de la época muestran que la gente de la calle solía ser muy honesta en sus respuestas: en sus ocupaciones y fuentes de ingresos adicionales indicaban "mísero, pero ladrón", "mísero, pero ratero", "mísero, pero músico/cantante", "prostituta" y otros.
Los más reservados para indicar las fuentes y volúmenes de sus ingresos resultaron ser los negociantes (igual que durante todos los censos posteriores), ya que temían nuevos impuestos.
El censo de 1926 registró 147.027.915 habitantes del país, 26.300.000 de ellos en ciudades (un 18%) frente al total de 125.640.021 habitantes que había en el Imperio ruso en 1897, 16.828.395 de estos en ciudades (un 13,4%).
Leer las partes anteriores:
Leer Parte I: HISTORIA DE LOS CENSOS EN RUSIA. 1987: ¡VIENE EL ANTICRISTO!
Leer más:
Leer Parte III: HISTORIA DE LOS CENSOS EN RUSIA. 1937 Y 1939: LA ERA ESTALINISTA
Leer Parte IV: HISTORIA DE LOS CENSOS EN RUSIA. 1959 - 1989: LOS PASTORES MATUSALENES
Leer Parte V: HISTORIA DE LOS CENSOS EN RUSIA. 2002: LOS ELFOS, UNA NUEVA TRIBU RUSA