Historia de los censos en Rusia. 2002: los elfos, una nueva tribu rusa
La historia mundial de los padrones está llena de todo tipo de sorpresas: los censores descubren y registran individuos matusalenes y nuevas tribus desconocidas, entre otras cosas.
Los rusos esperaban con mucha impaciencia el padrón de 2010: el primer censo nacional en la historia de la nueva Federación Rusa, en 2002, ofreció muchas noticias insólitas y ahora hay gran curiosidad sobre si el censo lanzado este 14 de octubre confirmará los datos.
Datos 'tradicionales'
En vísperas del colapso de la URSS en 1991, el último censo soviético de 1989 reveló que el país contaba con 286,7 millones de personas, mientras que la población de la República Soviética Socialista de Rusia era de 147,4 millones de personas.
El primer censo de la Federación Rusa en 2002 reveló que en 13 años la población se había reducido en 1,8 millones de personas, llegando a un total de 145.166.731 habitantes.
Los resultados del censo mostraron grandes discrepancias con los datos anteriores al registro local de la población. En el Extremo Oriente ruso, por ejemplo, el padrón no encontró a unas 150.000 personas: en el distrito autónomo de Chukotka, por ejemplo, fue establecido un récord particular, pues allí la falta llegó a un '– 28%'. Hubo también casos contrarios: en Moscú la cifra oficial de residentes era de 8,5 millones de habitantes, pero el censo registró 10,4 millones; y en la República rusa de Chechenia registraron un 77% más de residentes que en la cifra local anterior (1,1 millones de personas frente a 600.000). Estas diferencias provocaron muchas dudas en la autenticidad de los datos, tanto del registro local como del nacional.
Datos 'curiosos'
El censo de 2002 se enfrentó también con otro tipo de dificultades. Se conoce el hecho de que uno de los rusos se comió el formulario delante de los ojos del registrador, plasmado ante la señal de protesta contra la política estadounidense hacia Irak.
Y en la ciudad de Kursk, los habitantes de uno de los barrios rechazaron participar del padrón hasta que no se pusiera en marcha la calefacción central de sus casas: era el 9 de octubre y ya hacía un tiempo bastante frío.
Las tribus descubiertas: moscovitas, marcianos y elfos
Sin embargo, la mayor sorpresa les esperaba a los demógrafos. El censo registró en el país 183 etnias oficialmente reconocidas por la sociedad científica.
Pero además, en los formularios fueron inscritos 42.980 representantes de 'nacionalidades fantásticas' o 'nacionalidades de ficción', tales como moscovitas, Jedis, romanos, babilonios, enanos, genios del bosque, orcos, trolls, duendes, hobbits, elfos, marcianos, hadas del mediodía y muchos otros.En total se llegó a unos 430 grupos, muchos de los cuales contaban con más representantes que las exiguas etnias del Norte ruso. Todos ellos con sus tradiciones culturales y religiosas.
En la región de Sarátov una persona declaró que era cumano y demandó de Rusia una restitución, en forma de estepas cumanas, o una compensación por ellas en forma de un apartamento de tres habitaciones.
Uno de los diputados de la Duma Estatal de Rusia afirmó que era un pechenego.
En Rostov del Don (en las orillas del río Don, cerca de su desembocadura con el mar de Azov, a 1094 kilómetros de Moscú) los miembros de la sede del 'Congreso Nacional de los Escitas', con un total de 30 miembros, indicaron su antigua nacionalidad a los encuestadores. En vicepresidente del Congreso, Fiódor Mikishin, precisó que no todos los registradores tomaron seriamente el deseo de los ciudadanos de estar inscritos como escitas: algunos de ellos tardaron mucho en convencer a los censores de que ésta es la única y auténtica nacionalidad que admitían como suya.
En la República rusa de Tatarstán los censores registraron a una persona que declaró ser un inca y hablar la lengua de los mohicanos. Por lo visto, era un verdadero aficionado de Fenimore Cooper y su legendaria obra 'The Last of the Mohicans', una de las favoritas entre los niños rusos de todas las épocas. Confundió un poco a las tribus indígenas de los territorios de EE. UU. con las de América Latina, pero los registradores optaron por dejarle con sus ilusiones.
Otro ciudadano de Tatarstán se presentó a los censores como un papú. El 'papú ruso' logró insistir en que inscribieran así su nacionalidad: en caso contrario rechazaría suministrar cualquier tipo de datos acerca de sí mismo. La censora que rellenaba el formulario comentó luego que el piso del señor correspondía en un 100% a su presunta nacionalidad, igual que su 'ropa' y 'maquillaje'.
En la ciudad de Perm, situada al pie de los montes Urales, un grupo de jóvenes aficionados de la legendaria saga 'El Señor de los Anillos', de John R. R. Tolkien, insistió en que fueran registrados como elfos y hobbits.
En todo el territorio del país se tomaron los datos, además, de varios centenares de representantes de la etnia marciana.
Vladímir Zorin, el ministro de la Federación Rusa responsable por las políticas nacionales del país en ese entonces, comentaba: “Hoy en día, cuando la línea de la nacionalidad ha sido eliminada en los pasaportes, el censo es la única fuente de información acerca de la composición étnica de la población. Pero la identificación nacional es la decisión personal de cada indivíduo”. Acentuó que la nacionalidad indicada puede ser diferente a los documentos anteriores, a la opinión de los familiares y también al punto de vista anterior de esa misma persona hacia la cuestión: los registradores debían inscribirla tal y como lo quería el encuestado.
¡Elfos a la Duma Estatal de la Federación Rusa!
Con todo esto, surge un problema bastante interesante. Los resultados del padrón de 2002, con unas 430 nacionalidades de ficción registradas, muestran que en algunos casos las etnias 'imaginarias' cuentan con más integrantes que los poco numerosos pueblos aborígenes del norte ruso. Según comentan los expertos, esto les daría el derecho de demandar la creación de escuelas nacionales propias y la posibilidad de que sus representantes, la gente de su 'nacionalidad', manifieste sus intereses en organismos de autoridad, como la Duma.
Leer las partes anteriores:
Leer Parte I: HISTORIA DE LOS CENSOS EN RUSIA. 1897: ¡VIENE EL ANTICRISTO!
Leer Parte II: HISTORIA DE LOS CENSOS EN RUSIA. 1920 Y 1926: BOLCHEVISMO ES REGISTRO
Leer Parte III: HISTORIA DE LOS CENSOS EN RUSIA. 1937 Y 1939: LA ERA ESTALINISTA
Leer Parte IV: HISTORIA DE LOS CENSOS EN RUSIA. 1959 - 1989: LOS PASTORES MATUSALENES