El presidente venezolano Hugo Chávez finalizó su visita oficial a Rusia con un encuentro con el primer ministro ruso Vladímir Putin. Durante la entrevista, la atención se centró en los vehículos de guerra y civiles.
El jefe de gobierno ruso aseguró que Moscú va a cumplir su compromiso de suministro de tanques modernos al país latinoamericano en el futuro próximo.
“Rusia plenamente cumple los acuerdos en el ámbito técnico militar. Próximamente intentaremos suministrar una nueva partida de armamento”, dijo Putin en la residencia Novo-Ogariovo en las afueras de Moscú.
“Van a ser cerca de 35 tanques”, añadió. Aunque no precisó el tipo de tanques, los expertos creen que se trata de los T-72 y los T-90 ya adquiridos por una treintena de países.
Chávez apreció el estado de la coperación técnica militar entre ambos países haciendo hincapié en los proyectos conjuntos de fábricas de munición en su país.
La gran parte de la cooperación entre las dos naciones gira en torno a la venta de armas. Venezuela indudablemente lidera en la región en cuanto a la cantidad de contratos acordados con el exportador monopolista de armas ruso Rosoboronexport. Los acuerdos se avalúan en al menos 4 mil millones de dólares.
Entre las compras de armamento ruso de los últimos años figuran también maquinas blindadas, cazas Sukhoi y fusiles de asalto Kaláshnikov.
“Ahora sí tenemos unas Fuerzas Armadas”, recalcó Chávez.
Según la prensa rusa, Venezuela también está interesada en submarinos rusos diésel-eléctricos y sistemas de defensa antiaérea S-300. Se viene realizando ya el suministro de sistemas antimisiles Tor-M1 a ese país latinoamericano.
El líder venezolano aseguró que está confirmada la compra de automóviles rusos que, según él, son mucho más baratos que los modelos europeos, "gastan muy poco" y tienen buenas características técnicas.
Su simpatía por la industria automotriz rusa la demostró el viernes ya que durante todo el día se ha movido por Moscú en un Lada Priora. El mismo día la delegación venezolana firmó un plan de coooperación con el fabricante de coches ruso AutoVAZ, y Chávez aseguró que la planta de ensamblaje que será construida en Venezuela proveerá vehículos no sólo para el país, sino que también para las naciones del Caribe y el MERCOSUR.