El embajador ruso en Noruega, Viacheslav Pavlovski, no asistirá a la ceremonia de entrega del Premio Nobel de la Paz. Sin embargo, según un funcionario de la embajada, el hecho no tiene nada que ver con la política: en la fecha de la ceremonia, el embajador estará fuera de país.
Los diplomáticos de Irak, Kazajstán, Cuba y Marruecos tampoco estarán este día en Oslo, aunque no explicaron las razones de su ausencia.
El Premio Nobel de la Paz 2010 fue entregado al disidente chino Liu Xiaobo, encarcelado por haber participado en la elaboración de diversos manifiestos de artistas y activistas chinos, a favor de los Derechos Humanos.
Por desarrollar su lucha, Liu, profesor de la Universidad de Pekín de 54 años y el primer chino galardonado con este premio, tiene que cumplir una condena de once años de cárcel y otra de dos años de privación de los derechos civiles.
El Gobierno de China consideró la premiación de “un criminal que quiso subvertir el poder del Estado” una ofensa, y lanzó una campaña sin precedentes, enviando cartas a los embajadores en Oslo para que no asistan a la ceremonia. A la vez impuso diferentes obstáculos para que Xiaobo no reciba el premio.
Según las reglas del comité noruego del Premio Nobel, el premio puede ser entregado a un familiar si el mismo galardonado no tiene cómo recibirlo. La esposa de Liu Xiaobo actualmente se encuentra bajo arresto domiciliario en Pekín y otros familiares están impedidos de viajar por el Gobierno chino.
Así, el presidente del comité noruego del Premio Nobel de la Paz, Thorbiorn Jagdland, ha informado que la ceremonia el 10 de diciembre puede ser suspendida por la ausencia del premiado y de sus familiares.
Sin embargo, el Nobel 2010 de la Paz puede tornarse en “uno de los más importantes” en su historia, según lo declaró el presidente del comité.