¡Entreguen a Suecia al dueño de WikiLeaks como a un maníaco!

La Corte Suprema de Suecia rechazó la apelación del fundador de WikiLeaks, Julian Assange, a la orden de detención y decidió mantenerla vigente. En ese país al australiano de 39 años le acusan de acoso sexual a dos mujeres.

La Corte Suprema de Suecia rechazó la apelación del fundador de WikiLeaks, Julian Assange, a la orden de detención y decidió mantenerla vigente. En ese país al australiano de 39 años le acusan de acoso sexual a dos mujeres.

De acuerdo con la justicia sueca, aquellos delitos los cometió en 2009, es decir antes de que se pusiera a publicar en su página web los documentos clasificados del Pentágono y del Departamento de Estado. Por su parte, el creador del escandaloso portal rechaza las acusaciones y se declara víctima de una conspiración estadounidense.

Luego que la Policía de Reino Unido localizó el paradero de Assange en el territorio britano y se manifestó capaz de realizar la detención, una vez recibida la orden de INTERPOL y resueltas todas las cuestiones técnicas, sus abogados ventilaron la postura del inculpado respecto a la probable extradición. En particular, el letrado sueco, Bjoern Hurtig, prometió a la emisora pública Radio de Suecia que en caso de arresto Julian Assange junto con su defensa en Inglaterra se opondrán a la orden de la entrega con todos los medios.

Hurtig se mostró “decepcionado” por la decisión de la Corte Suprema sueca, que decidió no estimar el recurso a la orden de captura emitida contra Assange por un juzgado municipal. El dictamen implica que sigue vigente la 'notificación roja', el nivel más alto de INTERPOL, que se difunde para detener a los presuntos terroristas u autores de crímenes más abominables contra autonomía personal buscados internacionalmente.

La autoridad judicial desestimó el recurso al considerar que en su caso no hay motivos suficientes para conceder un auto de avocación. Este procedimiento necesario para revisar el dictamen de un tribunal inferior permitiría a la defensa solo aplazar la publicación de la orden de captura. Y para concederlo, es preciso que se estime que el caso tiene gran importancia en el ámbito nacional o que haya otras razones particulares, lo que la Corte rechazó. Los dos casos de acoso sexual de los que Assange es sospechoso están relacionados con su estancia de varias semanas en Suecia para pronunciar conferencias sobre su proyecto mediático.

De tal modo, las fuerzas del orden británicas espera instrucciones para capturar al fundador de WikiLeaks, mientras que la comunidad mundial está observando pruebas, expuestas por la web, de que el Gobierno del propio país ofrecía a EE. UU. buenas oportunidades de seguir almacenando bombas de racimo en su territorio después de que su uso y transferencia fueran prohibidos y condenados por Londres. Fue una “excepción temporal” ocultada al Parlamento britano, al tiempo que la Convención de 2008 —firmada por Gordon Brown junto con representantes de otras 89 naciones— prohibía incluso cualquier apoyo a otros países a almacenar o transferir esa clase de pertrechos. Esto es lo que revela un cable diplomático estadounidense filtrado entre miles de otros documentos del Departamento de Estado en Washington.